Un alcalde del PNV permite que una excompañera se construya un chalé en suelo municipal
El alcalde de Vitoria, el peneuvista Gorka Urtaran, permitió el trato de favor a una funcionaria para hacerse un chalé en una parcela propiedad del ayuntamiento y con perjuicio económico para las arcas municipales. El regidor del PNV y su equipo ignoraron los informes contrarios tanto del Interventor como del Director de Hacienda en los que alertaban de las irregularidades.
La operación se aprobó el pasado 1 de junio en Junta de Gobierno. Dos meses antes, el Director de Hacienda del consistorio vitoriano, Vidal Gorostiaga, ya había advertido de las anomalías que presentaba tanto la solicitud de la funcionaria (que había suscrito una hipoteca de 303.000 euros junto a su pareja) como el procedimiento. Primero, el director lo hacía en un correo electrónico a la Secretaría Técnica en el que alertaba sobre el «trato de favor con consecuencias económicas».
Una extraña solicitud
Se refería a la pretensión de la adquirente (funcionaria municipal, del Departamento de Políticas Sociales, el mismo en el que trabajó Urtaran antes de ser alcalde por el PNV y donde fueron compañeros) de que el ayuntamiento renunciara al rango hipotecario sobre el solar, en favor de la entidad financiera que le había concedido el préstamo.
Algo que comunican al ayuntamiento es necesario se haga tanto la pareja compradora del futuro chalé, como Laboral Kutxa, la caja que habría de darles la hipoteca. La entidad solicita esa singular modificación de condiciones directamente al ayuntamiento, lo que es inusual. Lo frecuente es que un banco no lleve a cabo esa gestión, sino que sea el propio cliente que quiere obtener el préstamo el que la realice. En este caso, primero lo hace la caja, y luego la propia funcionaria.
Informe del interventor
Pero esta operación cuyo perjuicio económico para el Ayuntamiento en beneficio de la trabajadora municipal pone en conocimiento Hacienda también la desaconseja poco después la Intervención General. En un informe con fecha de 29 de mayo, el interventor advertía oficialmente que el ayuntamiento «no debía renunciar a su posición privilegiada en la prelación de sus derechos». Y lo hacía yendo más allá: alertando sobre la «alteración del principio de igualdad que rige en toda contratación a celebrar por las Administraciones Públicas».
Una nota de reparo en la que el interventor municipal dejaba claro la vulneración que suponía para otros interesados el cambio de reglas de juego a conveniencia de los concesionarios de la hipoteca. Este trato de favor, confirmado por el área de Hacienda, y la ausencia de informe en contrario son los tres factores que diseñan un extraño acuerdo del equipo de gobierno del PNV y PSE en perjuicio del ayuntamiento de Vitoria y a favor de la funcionaria de marras.
La noticia del presunto trato de favor del alcalde Gorka Urtaran, que accedió al sillón consistorial en 2015, se produce apenas 24 horas después de conocerse que el ayuntamiento de Vitoria es uno de los investigados por la Fiscalía Anticorrupción en la Operación Enredadera. Una red de amaños en la contratación de semáforos y en la que la UDEF investiga tres contratos por un total de 80.000 euros.