Rivera llama a los partidos constitucionalistas a intentar formar un gobierno de coalición en Cataluña
El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, ha propuesto este viernes que los partidos constitucionalistas lleguen a un «pacto previo» en las próximas elecciones autonómicas catalanas para «formar un gobierno alternativo» al de los independentistas, donde la lista más votada pueda gobernar en coalición con otros partidos.
En declaraciones a Espejo Público, ha afirmado que hasta que los partidos constitucionalistas «no ganen en las urnas», el conflicto secesionista «puede parar un cuarto de hora pero reaparecer en dos años». «Hay que ser generoso y poder llegar a acuerdos», ha añadido.
«Los partidos constitucionalistas no solo hacemos acuerdos en el último momento, sino que creemos en la victoria, y para mí eso pasa por un acuerdo en el que la lista más votada pueda gobernar en un gobierno de coalición con otros partidos constitucionalistas», ha explicado.
Con respecto al líder de Podemos, Pablo Iglesias, se ha mostrado confiado en que su formación «apoyaría que gobierne una alternativa o se abstendría» y ha asegurado que «tendrá que decidir» entre el líder de ERC y actual vicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras, y «el candidato constitucionalista» cuando vea «sus pocos escaños».
Por otro lado, ha lamentado «el boicot» que se está haciendo a los productos catalanes «por el mero hecho de que provienen de Cataluña» y ha recordado que esto también «perjudica a empresarios valientes que dan la cara por España en la Comunidad Autónoma», ya que «los productores de esos productos pueden no ser separatistas».
Rivera ha asegurado que el conflicto secesionista «no se acaba con una carta» del presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, en la que aclara si el martes declaró o no la dependencia y ha explicado que se trata de «un problema de fondo» que necesita diálogo «pero dentro de la democracia, ya que fuera de ella no hay nada que dialogar».
Además, ha insistido en que es «incapaz de hacer una predicción» sobre la próxima decisión de Puigdemont ya que, según él, no puede meterse en «la cabeza de un señor que delinque». «Soy incapaz de meterme en el cerebro de un presidente que se ha saltado las leyes, la democracia y la Constitución», ha concluido.