Acuerdo PSOE-Podemos para coordinar la reforma laboral aunque sigue en el aire si la derogarán

Acuerdo entre el PSOE y Podemos para la coordinación de la reforma laboral, uno de los compromisos del Gobierno de coalición que debería ver la luz antes de que acabe el año. Tras varios días de crisis, la mayor que ha vivido la coalición desde que echase a andar hace diecinueve meses, los dos partidos que la conforman han pactado las condiciones en las que se va dirigir la parte final del diálogo entre el Ejecutivo y los agentes sociales. Habrá dos reuniones semanales, con presencia de los números dos de Trabajo y Economía, dejando fuera del día a día de las negociaciones a las vicepresidentas Nadia Calviño y Yolanda Díaz. La primera cita, la del reencuentro para fijar una posición común, será presidida el martes por Pedro Sánchez. Y es que pese a insistir la Portavoz Isabel Rodríguez, este martes, en que en eso iban todos en línea, la simple convocatoria de la reunión demuestra que no.

Trabajo seguirá coordinando la negociación de la reforma laboral. Pero tendrá vigilancia por parte de los ministerios de Economía y Transformación Digital y Seguridad Social e Inclusión. Es la fórmula que ha generado un mayor consenso en el seno del gobierno de coalición para desbloquear el acuerdo del quien en la crisis sobre la reforma laboral. Con esta medida la parte socialista del Gobierno pretende evitar la falta de información que, según denuncian, existía hasta el momento por parte del equipo de la vicepresidenta segunda. Ahora la discusión se centra en el qué y el cuando. Y fuentes del PSOE y Podemos ya avisan que las tensiones ahí serán más fuertes.

Joaquin Pérez Rey, secretario de estado de Trabajo y número dos de Yolanda Díaz, tendrá supervisión en los encuentros por parte del secretario de estado de Economía, Gonzalo García Andrés y el secretario de estado de Seguridad Social y Pensiones, Alberto Llorente. Los tres serán los responsables de fijar la posición común que el Ejecutivo defenderá en las reuniones previstas para los miércoles con los agentes sociales y otros ministerios implicados.

El próximo martes, 2 de noviembre, el presidente del Gobierno Pedro Sánchez convocará una reunión con las vicepresidentas Nadia Calviño y Yolanda Díaz, y los ministerios de Hacienda, de Seguridad Social y Educación y Formación Profesional, para fijar la posición del Gobierno en la mesa de diálogo social. Una posición que, a esta hora, es lo que separa a los dos socios de coalición. El contenido de la reforma, tal como ha apuntado Díaz, ya que una parte del gobierno representada por el PSOE habla de modernizar o actualizar la norma laboral y Podemos pide una derogación completa. Fuentes de Moncloa aseguran que se hará «en los términos del acuerdo de Gobierno de coalición».

En la cita de Moncloa, en la que participarán también los ministros de Hacienda, María Jesús Montero; Seguridad Social e Inclusión, José Luis Escrivá y Educación y Formación Profesional, Pilar Alegría, las dos almas del Ejecutivo buscarán alinearse para ir con una propuesta unitaria ante los agentes sociales. Con la cuestión de los nombres y las competencias de cada uno ya solventada y delimitada, con una receta que no es del agrado completo de Unidas Podemos, la tarea de los principales implicados en la negociación de la reforma laboral es ponerse de acuerdo en los términos en los que se debe producir, que según el comunicado emitido este miércoles son los de coalición y eso pasa por la derogación íntegra.

Pero tanto el presidente, como la vicepresidenta económica como la ministra Portavoz han evitado entonar el término derogar o derogación en todas sus intervenciones como miembros del Ejecutivo. Sánchez, sin embargo, si se refirió a la eliminación íntegra de la norma en un mitin del PSOE y la vicesecretaria del partido, Adriana Lastra, hizo lo mismo en declaraciones ante los medios. De ahí, que Yolanda Díaz haya exigido al líder socialista «que se aclare». El Gobierno tiene un compromiso con la Comisión Europea de alcanzar el acuerdo de la forma más amplia posible, con empresarios y sindicatos, algo que parece imposible, ya que entre los agentes sociales existe la misma discusión que entre los dos socios: unos quieren derogar la reforma y otros como mucho actualizarla.

Paralelamente a la reunión de los miércoles, todos los martes a las cinco de la tarde se celebrará una reunión para fijar la posición del Gobierno en esa mesa. A esa reunión asistirán el secretario de estado de Empleo, el secretario de estado de Economía y el secretario de estado de Seguridad Social y Pensiones. Son las mismas personas que se reunirán también los miércoles por la tarde para analizar el desarrollo de la mesa y coordinar el trabajo de preparación de la siguiente mesa de diálogo. En los encuentros se podrían sumar representantes de Hacienda, Educación y Formación Profesional o Agricultura, en función de los temas a tratar.

El comunicado de Moncloa añade que «asimismo, cuando sea necesario por la importancia o complejidad política de los asuntos, se producirán reuniones a nivel de vicepresidentas y ministros/as que se celebrarán, con carácter general, inmediatamente antes o después de la CDGAE para facilitar la coordinación de agendas».