Puigdemont busca casa urgente en Alemania para evitar la prisión
El equipo del ex presidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, busca desde este martes una vivienda donde instalarse en el estado alemán de Slesvig-Holstein con el fin de alegar un domicilio de residencia ante el juez que tendrá que decidir en los próximos días si le extradita a España y las medidas cautelares que toma mientras estudia, resuelve y ejecuta la entrega a las autoridades españolas.
Los responsables de buscar nuevo hogar a Puigdemont son los mismos que en su día encontraron y alquilaron la mansión de Waterloo (Bélgica). La vuelta este martes de Josep Maria Matamala, su amigo personal, a Neumünster (Alemania) responde precisamente a esta búsqueda de domicilio. Matamala, junto al historiador Josep Lluís Alay y a los dos mossos que protegían a Puigdemont en el momento de su detención, abandonaron Alemania el pasado martes por la tarde con el mismo coche en el que detuvieron Puigdemont, en dirección a Bélgica y de allí a Cataluña vía avión.
Aunque un diputado del partido de izquierdas alemán Die Linke ha ofrecido una vivienda a Puigdemont para residir mientras se tramita la euro orden, la intención del equipo de Puigdemont es la de disponer de una residencia temporal desde la cual poder recibir visitas y trabajar como líder del independentismo, de la misma forma que lo hacía desde Bruselas. Eso podría afectar también a su petición de delegación de voto en el pleno del Parlament, que hoy mismo se ha aceptado.
Tener una residencia conocida donde poder ser localizado de forma rápida y permanente por las autoridades policiales alemanas, es un requisito indispensable para que si a finales de semana el tribunal supremo de Slesvig decide dar trámite a la orden de extradición, este decida entre las medidas cautelares una libertad condicional, lo que permitiría a Puigdemont salir de prisión hasta que se tome una decisión final.
Podría ser investido vía Skype
Una de las particularidades que tiene la prisión preventiva de Puigdemont en Alemania a diferencia de las prisiones españolas, es que los presos tienen acceso a hacer llamadas vía Skype con la tutela de un funcionario. Precisamente un trabajador del centro penitenciario asegura a OKDIARIO que si Puigdemont lo pidiera, podría intervenir en reuniones o incluso en el pleno del Parlament por videoconferencia siempre y cuando no hiciera referencia a la violencia en su discurso. Esto facilitaría su intervención en un debate de investidura telemático, que aún así no contaría con la aprobación del Tribunal Constitucional.
Promete que si sale de prisión no se escapará
Además, Puigdemont ha asegurado en una entrevista con los diputados del partido Die Linke Zaklin Nastic y Diether Dehm realizada el domingo en la cárcel de Neumünster y difundida este martes en weltnetzTV: «Si la justicia alemana me dice que puedo salir de la cárcel, pero tengo que quedarme en el país, me quedaré. Por supuesto que no me escaparé», y ha dicho que debe respetar la decisión de las autoridades alemanas.
Defiende en inglés ser un progresista y estar contra la violencia y contra cualquier tipo de discriminación y explica a los diputados el caso del expresidente de la Generalitat Lluís Companys, además de criticar la ausencia de separación de poderes en España.