El turismo le alegra el año a la Sepi con la cancelación anticipada del 11,4% del total de ayudas Covid
Hotusa anticipa la devolución de 52 millones de euros, la cuarta parte de lo recibido
El Gobierno rescata a la primera hotelera, Hotusa, más de un año después de crear el fondo de la SEPI
Las empresas turísticas se han convertido en el ‘animador’ de las cuentas de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi) al menos en el arranque del año. Si, pasada la pandemia, el sector fue uno de los que más acusaron la paralización de actividades y el cierre de fronteras; también es uno de los que más rápidamente han recuperado impulso. El Grupo Hotusa, propiedad del empresario Amancio López, acaba de amortizar de forma anticipada 52 millones de euros, aproximadamente la cuarta parte de los 241 millones que le concedieron en junio de 2022. La Sepi recibe esos fondos tras el reciente acuerdo de venta de Air Europa a Iberia (Grupo IAG) que ha tranquilizado a todos los acreedores de la aerolínea balear, y suma también la devolución anticipada, en diciembre, de los 320 millones concedidos a Ávoris, como primera decisión del Grupo Barceló tras convertirse en accionista único de la misma. A eso hay que añadir el hecho de que el Grupo Hotels & Resorts Blue Sea haya renunciado a los 25 millones que le habían sido concedidos da cuenta de que la recuperación de la llamada ‘primera industria española’ es sólida.
Si el ejercicio de 2022 ha supuesto el de la recuperación, el año 2023 debe convertirse en el de la consolidación del crecimiento para todo el sector tal como ha arrancado su actividad. Solo en el mes de enero, el regreso masivo de turistas a España con más de 4,1 millones de visitantes (el 65,8% más que en el mismo periodo del año pasado) se puede dar como un hecho. La cifra se une a un aumento del gasto superior al 71,6% por parte de los turistas internacionales que, en el primer mes del año, se han dejado en el país más de 5.200 millones de euros (una media de 148 euros diaria) según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Viabilidad asegurada
El Grupo Hoteles Turísticos Unidos (Hotusa) explica la decisión como resultado de su evolución en 2022, año en el que ha aumentado su facturación el 1,5% respecto a 2019, «así como las buenas perspectivas para el presente ejercicio han permitido adelantar los plazos de dicha devolución». La compañía recibió un total de 241 millones de euros en dos formatos: 190 millones en forma de crédito participativo y 51 millones como crédito ordinario. Fuentes oficiales de la empresa no han querido desvelar a qué partida corresponden los 52 millones amortizados anticipadamente.
El grupo hotelero facturó 1.268 millones en 2019 con un crecimiento anual del 11% y empleaba a 4.085 trabajadores. Eso supone que la cifra de negocio de 2022 ha rozado los 1.300 millones de euros.
Entre los motivos que decidieron otorgar las ayudas públicas a la empresa presidida por Amancio López, estaba el hecho de que «el Grupo Hotusa posee un relevante carácter estratégico dentro del sector turístico», según informaba la Sepi que destacaba que su división hotelera (219 establecimientos) es la primera cadena del país por número de alojamientos (el 67% del total. En el ranking mundial de hoteleras, decía la Sepi, «ocupa el puesto número 41 debido a su estratégica posición internacional». Además, la división de servicios turísticos cuenta con más de 4.300 hoteles asociados en todo el mundo, 1.567 de ellos, en territorio español.
Algo parecido ocurrió a finales del año pasado cuando Ávoris Corporación Empresarial, resultante de la integración de los grupos Barceló y Globalia, recibió 320 millones de euros a través de un préstamo participativo de 163,2 millones y de un préstamo ordinario de 156,8 millones. La ayuda pública incluía varias condiciones, como el nombramiento de lo que la propia Sepi denominó «un observador con voz y sin voto en el Consejo de Administración, así como el establecimiento de una Comisión de Seguimiento del plan de viabilidad».
La ayuda financiera tenía un plazo de seis años. Pero ese plazo, lejos de agotarse apenas se prolongó, ya que un acuerdo entre los Hidalgo y los Barceló dio a este último grupo el control total de Ávoris. Su primera decisión como propietarios de la empresa: cancelar anticipadamente los créditos y asumir la gestión con total libertad.
En el momento de otorgarle las ayudas, la Sepi destacaba que el «carácter estratégico de Ávoris Corporación Empresarial es innegable, ya que cuenta con una notable presencia en los mercados internacionales, una relevante cuota de mercado, un gran volumen de negocio (4.067 millones de euros de facturación agregada en 2019), un importante número de empleados directos (6.400 trabajadores) y 1.470 puntos de venta en su red comercial».
Finalmente, el Grupo Hotels & Resorts Blue Sea ha decidido renunciar a los 25 millones de euros que le habían sido concedidos por el Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas: 20,84 millones en forma de crédito participativo y el resto como crédito ordinario. Según ha informado la empresa pública, la decisión del grupo hotelero de origen mallorquín, está «motivada por su capacidad de recuperación, plasmada en los resultados económicos obtenidos y la situación de liquidez favorable. A la vista de esta rápida mejora, la compañía ha decidido renunciar a la ayuda pública temporal».
Blue Sea explota 26 hoteles, gran parte de ellos en propiedad, ubicados principalmente las Islas Canarias y Baleares, además de en Girona, Málaga y Madrid, con una oferta total de unas 4.500 habitaciones en un modelo de negocio de tipo vacacional en el segmento midscale. A finales de 2019 Blue Sea empleaba a 971 trabajadores de forma directa y mantenía, indirectamente, a otros 680. La compañía cerró 2019 con unos ingresos de 86 millones de euros.
Sector castigado
La Sepi constituyó el Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas en junio de 2020 y analizó un total de 73 operaciones que solicitaron ayudas por casi 5.400 millones. De estas 73 solicitudes presentadas, la sociedad estatal seleccionó las 30 que podían acogerse a las mismas. En conjunto, estas 30 empresas empleaban a casi 62.000 trabajadores y facturaban 20.248 millones de euros, en el momento del estallido de la pandemia. Más de la mitad de las solicitudes recibidas procedieron de empresas turísticas (51%), el 34% a sociedades industriales y el resto, a compañías de servicios. Eso puso de manifiesto la dureza con que la parada de actividad que provocó la pandemia azotó al sector turístico.
Las ayudas públicas que se concedieron a empresas del sector turístico tras su aprobación por el Consejo de Ministros fueron para: Air Europa, Ávoris Corporación Empresarial, Hotusa, Air Nostrum, Plus Ultra Líneas Aéreas, Volotea, Wamos, Grupo Soho Boutique Hoteles, Grupo Inversor Hesperia (GIHSA), Grupo Abba, Grupo Julià, Grupo Serhs, Grupo Abades, Grupo Mediterránea, Meeting Point y Blue Sea.