Greta Thunberg ya está en Europa: llegará a Madrid en un tren-hotel con locomotora diésel
Durante 100km el tren depende de una locomotora diésel
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La joven activista Greta Thunberg ha llegado al puerto de San Amaro en la capital portuguesa este martes poco después de mediodía. Lo ha hecho a bordo del catamáran ‘La Vagabonde’ en el que ha viajado desde Salt POnds, en el estado norteamericano de Virginia, durante casi 21 días. La adolescente ha llegado al puerto portugués escoltada por diversas lanchas motoras con periodistas que cubren su llegada a Europa.
Thunberg ha ofrecido una rueda de prensa a su llegada a la capital lusa, donde la esperaban unos 300 jóvenes para darle la bienvenida. Desde el país vecino partirá hacia Madrid donde cumplirá su objetivo de asistir a la XXV Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Cambio Climático de la ONU (COP25) que se celebra en la capital española en vez de en Santiago de Chile, donde estaba prevista inicialmente, por la situación que vive el país suramericano.
El equipo de la joven sueca ha puesto fin, este martes, a la incógnita sobre qué medio de transporte elegiría la activista para llegar a la capital española. Finalmente ha rechazado el coche eléctrico ofrecido por el gobierno autonómico de Extremadura y llegará a Madrid montada en el tren-hotel Lusitania que realiza el trayecto entre Lisboa y Madrid efectuando 14 paradas.
La elección no es del todo acorde a sus parámetros de viaje ecológico, dado que en una parte del trayecto las vías no están electrificadas. Es en ese tramo, los 100 kilómetros entre la frontera de Portugal y Medina del Campo, el tren depende de una locomotora diésel que produce el doble del CO2 producido por los trenes eléctricos. Greta viajará este mismo martes por la noche para llegar el miércoles a primera hora a Madrid.
De Casiraghi a una familia de influencers
La pasada madrugada a las 07.00 horas, la joven ponía en la red social Twitter una foto con las luces de tierra a lo lejos y un mensaje que decía ‘Land ahoy’, que significa «Tierra a la Vista» mientras el lunes por la tarde explicaba que en su último día de navegación ya casi podía oler la tierra.
Según informaron a Europa Press fuentes de Naciones Unidas, se espera que la joven intervenga ante los líderes mundiales de 196 países que participan en la COP25 y, además también prevé participar en diferentes actividades, no solo en Ifema, sino también el la ciudad de Madrid. Su presencia se espera en la gran manifestación que recorrerá Madrid el 6 de diciembre para reclamar urgencia y ambición climática.
Thunberg, que había viajado con su padre el pasado verano desde Gran Bretaña a Nueva York, a donde llegó a principios de septiembre en el barco ecológico ‘Malizia’ de Pierre Casiraghi, para asistir a la Cumbre de Acción Climática que tuvo lugar el 23 de septiembre. Su plan inicial era viajar por el continente americano llevando su mensaje de urgencia climática hasta llegar a Santiago de Chile, donde estaba prevista la celebración de la COP25.
Sin embargo, la situación de crisis social en el país latinoamericano llevó al presidente chileno, Sebastián Piñera, a renunciar a acoger la cumbre a finales del mes de octubre. Una vez la COP chilena se trasladó a Madrid, Thunberg buscó entonces un modo de transporte acorde a sus requerimientos climáticos para viajar hasta la capital española, puesto que no viaja en avión por la emisiones de gases de efecto invernadero asociadas.
La ministra para la transición ecológica en funciones, Teresa Ribera, desde su Twitter personal, ofreció la ayuda de España a la joven para que pudiera asistir a la Cumbre y cuando parecía que finalmente no acudiría, Greta anunció que viajaría en catamarán con una familia australiana que viaja por el mundo con su bebé en un catamarán.
La joven inició hace un año una huelga ante el parlamento sueco cada viernes para protestar por la falta de acción contra el cambio climático y semana tras semana ha ido inspirando un movimiento mundial de jóvenes que se ha puesto en pie para exigir políticas acordes con la emergencia climática que permitan limitar el aumento de la temperatura global del planeta a 1,5 grados centígrados.