«La borrasca se ha llevado los ingresos con los que pagaríamos los ICO»
El temporal Filomena ha paralizado la Comunidad de Madrid. La estampa de la capital cubierta de nieve comienza a ser una pesadilla para muchos agricultores, personas dedicadas al cultivo de plantas que han visto como sus instalaciones y cosechas han sufrido daños irreparables. Ante todo esto el Gobierno de Pedro Sánchez se niega a declarar Madrid como zona catastrófica pese a las imágenes del impacto que la borrasca ha tenido en la capital y en gran parte de la Comunidad.
Este lunes el Ayuntamiento de Madrid planteaba la posibilidad de solicitar la declaración de zona catastrófica tras los efectos del temporal en la capital. Sin embargo, el Ministerio del Interior ha estado alegando incluso que no hay daños importantes en Madrid para hacer esta constatación, pese a las imágenes que lo confirman. Sin embargo, tal y como adelantaba OKDIARIO, se estima que el importe de los daños que Filomena ha dejado, solo en la ciudad, a 500 millones de euros.
La otra cara de la nevada muestra los múltiples daños ocasionados por el temporal que, para muchos trabajadores y pequeños empresarios supone la quiebra de sus negocios. Jesús Izquierdo, uno de los propietarios de un vivero al sur de la Comunidad de Madrid señala que la borrasca ha devastado todos sus cultivos y la mayoría de sus invernaderos, así como el resto de sus instalaciones, están destrozadas.
“Todos los productos con los que pensabas comenzar la temporada a partir de marzo se han echado a perder. He tenido que paralizar los pedidos a proveedores porque ante los daños causados por la catástrofe no les puedo pagar”, afirma Jesús.
El temporal ha causado pérdidas de productos valoradas en 150.000 euros. Asimismo, con los invernaderos totalmente destrozados las pérdidas podrían ser de hasta 300.000 euros, a la espera de poder cuantificar todos los daños, una vez que el hielo y la nieve que cubren las instalaciones permita el acceso. Estos estragos del temporal no hacen más que acentuar la mala situación de muchas empresas, que seguían manteniéndose a través de los créditos ICO para paliar el impacto que las restricciones y confinamientos habían generado en su actividad. La pérdida de todos sus productos -con los que pensaban pagar los préstamos- dificulta la subsistencia de este tipo de comercios que afirman encontrarse en ‘quiebra técnica’ tras el temporal.
Otro de los grandes problemas que denuncia el dueño de este vivero es la incertidumbre en las ayudas y prestaciones de la aseguradora. Su empresa familiar cuenta con un seguro de responsabilidad civil para los daños a clientes y trabajadores, pero no contempla los daños ocasionados por el temporal. Desde el Consorcio de Compensación de Seguros, adscrito al Ministerio de Asuntos Económicos señalan que las nevadas no entran dentro de las coberturas, por lo que tampoco se hacen responsables de las indemnizaciones por los daños causados.
Pérdidas del 100% de la cosecha
En el caso de los agricultores la situación es todavía peor. Algunos trabajadores del sector afirman haber perdido el 100% de la cosecha, a lo que se suma las pérdidas en las instalaciones. Uno de estos agricultores, Ángel García afirma que en estos momentos es imposible cuantificar las daños ya que los accesos a las instalaciones están totalmente bloqueadas.
“El 100% de la cosecha se ha echado a perder. La mayoría de nuestros invernaderos no están visibles y los que se ven están totalmente destrozados. Nos sentimos totalmente abandonados” señala Ángel García.
En el caso de los seguros en este sector, es Agroseguro -encargada de la gestión de los seguros agrarios en nombre de las entidades aseguradoras que forman parte del pool de coaseguro- quien se responsabiliza de las indemnizaciones. La firma ha asegurado que los daños provocados por este tipo de fenómenos meteorológicos están cubiertos por el sistema español de Seguros Agrarios Combinados.
En concreto, los siniestros provocados por nevada y viento están recogidos en todas las líneas de seguro agrario y, en el caso de las heladas –una opción asegurable para los agricultores–, se pueden cubrir los daños que sufran tanto las cosechas como los árboles. Además, el seguro también ofrece la posibilidad de asegurar y proteger las instalaciones y mallas ante los daños.
Sim embargo, esta situación también deja fuera a algunos pequeños empresarios como es el caso de Ángel, que señala que se ha puesto en contacto con la firma de seguros, donde le han señalado que uno de los requisitos indispensables, para poder recibir la indemnización por los daños, es contar con un seguro previo.
Así, ante las pérdidas de miles de euros, los daños en las instalaciones y la incertidumbre que rodea las coberturas de los seguros del sector, muchos agricultores profundizan una mala situación que ensombrece el futuro de su actividad.
Son sólo algunos casos, ya que, hasta el momento, el sector textil ha avanzado que únicamente en el primer fin de semana de rebajas en Madrid se habrán perdido 3.000 millones euros, como ha avanzado este martes OKDIARIO, o que la hostelería madrileña cifra el destrozo económico en 70 millones de euros, aunque sin duda son solo primeras estimaciones que pueden aumentar conforme pasen los días.