A Zidane le encantan los Special K

Después de ganar dos Champions en apenas año y medio, Zinedine Zidane tenía las ideas claras con respecto al proyecto deportivo para esta temporada y una de ellas era que Keylor Navas y Kiko Casilla seguirían siendo sus porteros en la 2017/2018. Tras convertirse en el único entrenador en repetir título con el nuevo formato de la máxima competición europea, el técnico se ganó el derecho a decidir y en la cúpula del club han respetado al máximo la petición del galo.

Porque Zidane confía en su Special K por encima de todas las cosas y lo ha vuelto a demostrar en otro verano en el que el nombre de David de Gea ha vuelto a salir a relucir. El Real Madrid volvió a tantear al portero español, al que estuvieron a punto de fichar en verano de 2015 (el fax lo evitó), pero tanto el cuerpo técnico como el vestuario tenían claro que el portero titular del Real Madrid tenía que volver  a ser Keylor Navas.

Así se encargaron de transmitirlo los capitanes, en nombre de Ramos y Zidane a la cúpula del club cuando surgió la posibilidad de fichar al meta del Manchester United y posteriormente a Donnarumma. Y el club escuchó los deseos de una plantilla que se ha hecho un hueco en la historia después de haber ganado tres Champions en los últimos cuatro años: Keylor Navas seguiría siendo el portero del Real Madrid.

Y es que Zidane siempre ha confiado en Keylor Navas. Después de su excelso rendimiento en los primeros meses del galo que desembocaron en la Décima, el meta se operó del tendón de aquiles y posteriormente vivió sus peores momentos con la camiseta del Real Madrid. Incluso se pidió su suplencia pero el galo apostó por él y el tico acabó la temporada rindiendo de forma excepcional y siendo uno de los hombres clave en la consecución del doblete 59 años después.

Casilla, más que un segundo portero

Kiko Casilla es más que un simple segundo portero para Zidane. Después de sus grandes actuaciones durante la temporada pasada, muchos equipos han llamado al club para intentar para hacer una oferta pero tanto el jugador como el técnico lo han tenido claro desde el primer día: Kiko seguiría siendo un ‘suplente’ de lujo en el Real Madrid.

Y es que Kiko Casilla no es el clásico segundo portero intrascendente. El meta catalán se siente importante dentro de la plantilla y el año pasado también fue clave en la consecución del doblete de Liga y Champions. Porque el meta catalán participó en 1.726 minutos la pasada temporada, algo no habitual para un segundo portero.

Pero Casilla es más que eso. En sus 11 partidos de Liga, 6 de Copa del Rey, uno de Champions y otro de Supercopa de Europa demostró que sería un portero titular en muchos de los mejores equipos de Europa. En el total de 19 partidos que disputó recibió 22 goles y consiguió mantener la portería a cero en seis de ellos. Unos números que delatan sus buenas actuaciones.

Por ello, Casilla seguirá siguiendo otro jugador importante en la rotación de un Zidane que siempre ha tenido claro la importancia de las rotaciones. El canterano madridista seguirá siendo pareja de Keylor Navas en la portería de un Real Madrid que está más segura que nunca. De Gea y Donnarumma, que podrían llegar en un futuro, de momento pueden esperar.