ATHLETIC DE BILBAO VS REAL MADRID: JORNADA 28 DE LIGA

El siguiente reto de Cristiano: el nuevo San Mamés

Cristiano aún no ha marcado en el nuevo San Mamés. (AFP)
Cristiano aún no ha marcado en el nuevo San Mamés. (AFP)
Pedro Antolinos

Cristiano Ronaldo tiene una cuenta pendiente con el nuevo San Mamés. El estadio vasco es uno de los pocos que se le resiste a la estrella portuguesa que sabe lo que es celebrar un tanto en hasta 37 campos de la geografía española. En los tres partidos que ha disputado en la nueva casa del Athletic Club no ha conseguido marcar e intentará acabar con la maldición en el cuarto intento en un partido que puede valer una Liga.

Junto a San Mamés, sólo en El Arcángel de Córdoba, La Condomina de Murcia y en Gran Canaria no han visto a Cristiano celebrar un gol. Pero en los dos últimos sólo ha jugado un partido. En tierras andaluzas fue expulsado por agredir a Edimar en una victoria blanca 1-2 en enero de 2015 y en Murcia disputó 69 minutos en una eliminatoria de Copa del Rey disputada en 2013 con Mourinho en el banquillo. Por su parte, en el estadio insular no ha sido capaz de marcar en dos partidos.

En el resto de campos en los que ha jugado el portugués siempre ha marcado (en Anoeta ha anotado un tanto en la famosa falta que prolongó Pepe). Este año cumplió con el trámite en Mendizarroza donde firmó hat-trick en su primer partido allí e intentará hacer lo propio dentro de unas semanas en Leganés.

Asistencia, expulsión y derrota

A Cristiano Ronaldo le ha pasado de todo en el nuevo estadio rojiblanco. En su primera visita en febrero de 2014 con Ancelotti en el banquillo, el luso vio como le anulaban un gol antes de repartir una asistencia de gol. Más tarde, el luso fue expulsado por sendas ‘agresiones’ a Gurpegui e Iturraspe. Al final el partido acabó 1-1.

Cristiano fue expulsado en su primera visita a San Mamés. (Getty)
Cristiano fue expulsado en su primer partido en el nuevo San Mamés. (Getty)

En marzo de 2015, el Real Madrid de Ancelotti se presentó en Bilbao en el primer puesto de la tabla y acabó perdiendo el liderato tras caer 1-0. En 2016 y ya con Rafa Benítez en el banquillo, el conjunto madridista consiguió su primera victoria en el nuevo San Mamés gracias a un doblete de Benzema (1-2).

Pero, Cristiano sí sabe lo que es marcar en ‘La Catedral’. En los siete partidos que disputó en San Mamés anotó cuatro goles. Es más, el luso fue el autor del tercer tanto en la victoria (0-3) del equipo de Mourinho que cantó el alirón en mayo de 2012.  En su última visita al templo vasco, firmó un doblete en otro triunfo blanco (0-3) en el último año de técnico luso.

Tira del carro a pesar de no marcar tanto

Cristiano Ronaldo no está devastando estadísticas esta temporada pero está apareciendo en los momentos importantes para, junto con Sergio Ramos, salvar a un Real Madrid que no se está moviendo en la línea de la excelencia en lo que ha juego se refiere.

Tras lesionarse y levantar la Eurocopa después de llegar mermado a un tramo decisivo de la temporada, el delantero se ha concienciado que en la dosificación física está la clave para perdurar en lo más alto del fútbol. Y para ello es necesario apartar las estadísticas a un lado. El luso comenzó esta temporada con cautela, se ha quedado fuera de la convocatoria a la mínima molestia y parece que llega enchufado al tramo decisivo de la temporada.

Cristiano celebra un tanto ante el Betis. (Getty)
Cristiano ha marcado 9 goles en los últimos 10 partidos de Liga. (Getty)

Y es que el luso ha marcado 9 goles en los 10 últimos partidos de Liga que ha disputado. Hasta en ocho partidos distintos ha logrado ver puerta y en duelos ante Osasuna, Las Palmas (doblete) y Betis ha sido decisivo para que el Real Madrid pueda seguir en la cabeza de la tabla. Siempre que el equipo ha tenido un problema, ha aparecido el luso.

Las estadísticas nos inducen a pensar que el luso no rebasará los 50 goles por primera vez en seis temporadas pero parece que todo ello está siendo en sacrificio del equipo. En los 2.943 minutos que ha disputado esta temporada repartidos en 33 partidos ha logrado anotar 26 goles (anota un gol cada 113 minutos, algo más de un partido). Unos números que están lejos de los 51 goles que anotó la pasada temporada o los 61 que realizó la 2014-2015 su máxima cifra goleadora con el Real Madrid (en la 2011-2012 marcó 60 tantos).

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