Sergio Ramos fue expulsado por doble amarilla, pero no se pierde el Clásico

Sergio Ramos terminó expulsado en el duelo que enfrentó al Real Madrid y al Girona en el estadio Santiago Bernabéu. Primero vio una amarilla por cometer una mano dentro del área que el árbitro decretó pena máxima. En los minutos finales fue amonestado de nuevo, esta vez por juego peligroso al tratar de rematar un balón de chilena.

Esta expulsión no permitirá jugar a Sergio Ramos el partido ante el Levante el próximo fin de semana en el Ciudad de Valencia, aunque sí podrá estar en el Clásico que se celebrará en Chamartín. Eso sí, seguirá teniendo cuatro amarillas, por lo que si ve una quinta ante los azulgranas volverá a estar sancionado un encuentro.