La maldición del blanco vuelve a caer sobre España

Durante los meses de temporada, los tenistas españoles de mayor nivel acostumbran a ser maniquíes de las marcas deportivas que les visten. Diseños cada vez más innovadores, en lo técnico y en lo creativo, pero también en lo colorido. Hasta hace muy poco, lo único que era seguro era que en su cita con la Copa Davis, los miembros de la Armada vestirían de rojo. Sin embargo, el cambio de criterio del torneo y la imposibilidad de coincidir con el equipo contrario ha hecho que los equipos deban contar con una segunda equipación. Ante Croacia, España, que partía como visitante, volvió a vivir la recién nacida maldición del blanco en sus propias carnes.

Pese a que la Final 8 de la Copa Davis 2022 tiene, de nuevo, a España como sede, el equipo nacional es anfitrión, pero no local en el torneo. Esto queda ya obsoleto y correspondiente a las previas y al antiguo formato. El ideado por Gerard Piqué y su empresa, Kosmos Tennis, de la mano de la ITF, aboga por la máxima igualdad, por lo que según el cuadro, España tenía la condición de visitante, dejando la localía a Croacia y también el color rojo característico de los colores de ambos.

Así las cosas, tanto Roberto Bautista como Pablo Carreño lucieron de blanco impoluto como color en su camiseta y pantalón. El set de ropa del equipo, con Bruguera como capitán, también era del mismo color. Era la segunda vez en la presente edición que esto sucedía y, casualmente, han sido las dos derrotas de España en la Copa Davis 2022.

El otro episodio se vivió en septiembre, en la fase de grupos que España disputó en Valencia. Allí, misma fórmula de anfitrión, pero no local, y en el duelo frente a Canadá, el equipo nacional era visitante y debía vestirse de blanco, dejando el rojo a su rival. Entonces, Bautista sí pudo ganar su partido como número dos, pero ni un Carlos Alcaraz recién aterrizado desde Estados Unidos ni el dobles pudieron con la gran actuación de la Canadá de Auger-Aliassime, que clasificaba para la Final 8 de noviembre y dejaba a la Armada pendiente de cerrar su pase, algo que había adelantado ante Serbia, de rojo, y que también de rojo cerraría frente a la teórica cenicienta, Corea del Sur.

España, en blanco por primera vez

Desde que se instaurase el nuevo formato de la Copa Davis, no sabía lo que era despedirse del torneo sin haber ganado un solo partido en una eliminatoria. En 2019, el combinado nacional, dirigido por Rafael Nadal, fue superando cada escollo hasta conquistar la Ensaladera en la Caja Mágica de Madrid, misma ciudad en la que, clasificada directamente a las Finales, la Armada se despediría en fase de grupos después de vencer a Ecuador y caer ante Rusia, aunque en esta ocasión Feliciano López le arrebató un punto a Andrey Rublev. 

En este 2022, España superó la primera prueba en marzo ante Rumanía, en las previas, antes de ganar dos series en septiembre (Serbia y Corea) y sólo ceder ante Canadá, donde Roberto Bautista ganó el primer encuentro de la serie. Ya en Málaga, la Armada se despide con un 2-0 en contra y sin disputar el dobles, innecesario en términos competitivos, por lo que supone el primer tropiezo en blanco en la ‘era Kosmos’ de la Copa Davis.