Keylor paró al Barcelona y a Messi con un partido de 10
Keylor Navas fue el gran protagonista del PSG en un partido de 10 con nueve paradas, entre ellas el penalti a Messi, y dos despejes fundamentales
Fue galardonado con el MVP del partido tras parar un penalti a Messi
El Barcelona fue incapaz de doblegar al Paris Saint Germain en el Parque de los Príncipes. El nimio empate a uno cosechado en París aboga al equipo culé a un adiós prematuro de la Champions League, en octavos, algo que no pasaba desde hace 14 años, que se despidieran de la competición antes de los cuartos de final. La ida en el Camp Nou con el recital de Kylian Mbappé tuvo mucho que ver (1-4) pero si hubo un gran héroe en el PSG esta noche en París ese fue Keylor Navas.
El costarricense fue el gran protagonista del Paris Saint Germain ante el Barcelona. Su actuación bajo palos eclipsó a cualquier jugador de campo en un partido en el que los culés atacaron mucho y bien, de hecho. El primer tiempo del equipo de Koeman fue muy ofensivo, constante en sus llegadas y oportunidades. No pararon de intentarlo una y otra vez con la velocidad de Dembélé a la espalda de la zaga, por alto, con Leo Messi como artillero… pero en la última línea siempre estuvo el mismo: Keylor Navas.
Keylor Navas fue un muro infranqueable para el Barcelona durante la primera mitad. Si bien es cierto que el misil que se inventó Leo Messi fue incapaz de detectarlo, en el resto de acciones el costarricense fue puro acierto. El Barça acabó la primera parte con la friolera de 16 disparos por los cinco que probó el PSG, aunque ambos lograron lo mismo, un gol. De esos 16 chuts, nueve de ellos fueron entre los tres palos en esos primeros 45 minutos. En solo uno de ellos, el de Messi, no apareció Navas.
Keylor acabó el partido con nueve paradas, un duelo áreas ganado –el que tuvo con Dest– y dos despejes de puños para un total de 12 intervenciones de mérito que le brindan el 10 del partido. Navas hizo un partido de diez, completísimo bajo palos y hábil y rápido para sostener a sus compañeros y hacer válido el 1-4 de la ida en el Camp Nou. Por más que lo intentaron los culés, de todas las maneras, el meta de los parisinos siempre actuó como un gacela y con reflejos de gato.
El momento clave del partido, lo que podría haber cambiado el rumbo de las cosas según el propio Ronald Koeman, fue el penalti a favor del Barça en el descuento del primer tiempo. Kurzawa se pasaba de frenada ante Griezmann y cometía una clara pena máxima que intentaría transformar Leo Messi. El argentino, tras lograr un golazo minutos antes, iba con confianza pero Navas se hizo gigante bajo palos. El costarricense adivinó la trayectoria del balón y se lanzó sin dudar a su derecha, justo donde Messi disparó con potencia, abortando el 1-2.
No fue la única intervención de mérito de Navas. También fue clave para desviar el disparo de Dest que se acabaría estrellando en la madera o algunas acciones de mano a mano con Dembélé, que no estuvo nada fino de cara a puerta ante el portero del PSG.
Artífice de la desilusión
«No es un secreto que si lo meten era una motivación extra pero al fallarlo ha sido una desilusión para ellos», reconocía el propio Keylor Navas en zona mixta, sabedor de lo importante que fue su partido ante los culés y su parada ante Messi: «Son cosas que pasan en el fútbol y estoy contento de haberlo parado. Se lo dedico a Sergio Rico y a su familia, que están pasando un momento complicado».
El costarricense recalcó que intuyó que el argentino podía cambiar la dirección de su penalti con respecto al último partido: «Nunca se sabe por dónde puede chutar Leo porque ha chutado 60 penaltis o más pero tenía la sensación de que iba a cambiar respecto al otro partido y que iba a tirar al otro lado. Ha salido bien».
«Estoy muy contento por haber ayudado a mi equipo. Estuve unos años en Madrid y lo pasé increíble ganando títulos. Tengo mucho cariño al club y a la afición pero esa es otra historia y ahora lo doy todo por el PSG», cerraba el protagonista de la noche de Champions League, ex jugador blanco que aún recuerda con grata simpatía su paso por el Real Madrid.