Un Guardiola prehistórico en el Metropolitano
El Manchester City salió ganador de una auténtica batalla en el Metropolitano y lo hizo sufriendo mucho en los minutos finales del partido contra el Atlético de Madrid. Los colchoneros acabaron muy cabreados por las pérdidas de tiempo de los jugadores del equipo inglés, como ocurrió con una jugada de pillo de Phil Foden que sacó de sus casillas a Stefan Savic.
Pep Guardiola había criticado en la ida el fútbol «prehistórico» que propone Simeone y el karma le devolvió la jugada en el duelo de vuelta de cuartos de final de la Champions League, ya que sus pupilos no dudaron en recurrir a los pelotazos e incluso a la pérdida de tiempo cuando se vieron contras las cuerdas en la capital española.
En la acción de Felipe que le supuso la tarjeta roja, Foden rodó por el suelo tras sufrir la entrada del brasileño y luego cambió el rumbo de sus volteretas para volver a meterse dentro del campo, una clásica maniobra para que corra el reloj. Una triquiñuela en toda regla. Savic lo vio más cerca que nadie y corrió para agarrar a Foden de la camiseta y arrastrarlo fuera del rectángulo de juego.
La acción resumió la extrema necesidad de un Manchester City que, después de ser muy superior en el duelo de ida y no permitir a su rival ni un solo disparo a puerta, vio cómo el Atlético disparaba a portería en 14 ocasiones en el Metropolitano, cuatro más que su rival.
Sin embargo, el marcador no se movió y Guardiola respiró tranquilo, la clasificación estaba en su mano sin importar la renuncia al libro de estilo por un día. Mientras tanto, la afición colchonera le dedicaba gruesas palabras al considerarlo instigador de las artimañas de sus jugadores en un partido lleno de intensidad y nervios por ambos bandos.