Open de Australia 2020

Garbiñe cae ante Kenin en la final de Australia

Garbiñe Muguruza no pudo con Sofia Kenin y se quedó a las puertas de ganar su primer Open de Australia. La española ganó el primer set pero acabó cayendo por 4-6, 6-2 y 6-2

WTA coronavirus
Garbiñe, en un momento de la final del Open de Australia. (Getty)
Miguel Zorío

Sigue el gafe español en Australia. Garbiñe Muguruza cayó en la final del Open de Australia ante una Sofia Kenin magistral, que no acusó en nada su juventud ni su debut en una final de Grand Slam. La estadounidense logró remontar después de perder la primera manga y se impuso en tres sets por 4-6, 6-2 y 6-2. Los nervios pasaron factura a la española en los momentos claves y acabó cediendo.

La ex número uno del mundo tenía ante sí la difícil tarea de acabar con el gafe español en Australia. Casualmente, tal día como hoy hace 11 años Rafa Nadal ganó su primer y único Open de Australia. El balear es el único español que había logrado el título aquí, ya que en femenino Conchita Martínez perdió una final mientras Arantxa Sánchez Vicario cayó en dos ocasiones.

El partido arrancaba con una Garbiñe algo nerviosa en los primeros puntos, la bola de Kenin corría mucho y apenas podía responder. Pero la pupila de Conchita Martínez reaccionó bastante rápido y ayudada por su servicio cambió la tónica del encuentro y empezó a dominar desde el fondo de pista, como a ella más le gusta. Así llegó el break en el tercer juego de la primera manga.

La estadounidense logró salvar las dos primeras pelotas de rotura con restos ganadores pero a la tercera la bola se marchó al pasillo. Muguruza golpeaba primero con ese break para colocarse 1-3. Apenas sufría con su servicio mientras que al resto estaba poniendo en aprietos a su rival que tuvo que hacer frente a varias pelotas de rotura en sus dos siguientes turnos de saque.

De hecho, con 2-4, la española se puso 0-40. Tenía tres bolas de break para el 2-5 pero no estuvo acertada y Kenin llegó a salvar la rotura hasta en cuatro ocasiones en ese juego. Acto seguido, con bolas nuevas, Garbiñe sufrió sus primeros problemas con el saque y la estadounidense de origen ruso logró su primer break.

Del posible 2-5 se pasó al 4-4 tras dos dobles faltas seguidas de Muguruza. Sin embargo, la tenista de Caracas se repuso rápidamente con un contrabreak para luego cerrar el primer set con su saque (6-4). Comenzaba mandando en el partido, se encontraba muy cómoda cada vez que entraba en pista y golpeaba por delante de la línea de fondo. Pero Kenin todavía no había dicho su última palabra.

Kenin desactiva a Garbiñe en el segundo set

La número 15 de la WTA empezó mejor en la segunda manga, mucho más acertada en sus golpes que la española. Garbiñe no dominaba con su saque y eso provocó el break de la estadounidense en el cuarto juego. Kenin se colocaba 4-1 arriba con una rotura de ventaja. Muguruza estaba desaparecida, su rival le había metido una marcha más y conseguía conectar golpes ganadores.

La española consiguió poner el 2-4 en el marcador pero fue un espejismo. No llegó la reacción y Kenin cerró el segundo set al resto con un nuevo break (6-2). El partido se complicaba para la ex número uno del mundo, que atravesaba por su peor momento del choque. Necesitaba recuperar su mejor nivel si quería levantar el título en la Rod Laver Arena, el tenis que le llevó a ganar a tres top 10 como Svitolina, Bertens y Halep.

Llegaba el momento clave del partido, el tercer y definitivo set. Muguruza tenía más experiencia que su rival en este tipo de partidos, pero a pesar de su juventud (21 años) Kenin no daba muestras de dudas. La norteamericana jugaba muy largo y eso estaba poniendo en aprietos a la española. Tocaba tirar de experiencia y veteranía para levantar este choque. Garbiñe consiguió poner en problemas a su rival en el quinto juego.

Como pasara en el primer set, la española tuvo un 0-40 para poner 2-3 arriba pero de nuevo Kenin sacó su mejor tenis cuando estaba contra las cuerdas y en ningún momento le dio opciones de dominar el punto y levantó las tres pelotas de rotura para salvar un juego muy complicado que fue clave a la postre. La estadounidense levantó un 40-15 al resto para conseguir un break fundamental que le colocaba 4-2. En los momentos importantes se le aparecieron los fantasmas del pasado y el partido acabó con una doble falta de Muguruza.

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