Puigdemont prepara un acto en Perpiñán con los indultados para presionar a Sánchez con su regreso
La salida de los golpistas de prisión, gracias al indulto que les otorgó el Gobierno socialcomunista de Pedro Sánchez, permitirá al separatismo montar otro acto con el que persiguen repercusión internacional. Perpiñán, al sur de Francia, será de nuevo el escenario elegido por el Consell per la República para el show dirigido desde Waterloo (Bélgica) por Carles Puigdemont y Toni Comín. El objetivo de los fugados es evidenciar las diferencias entre los que están en España y ellos y venderse como víctimas de la represión para exigir al Gobierno su retorno sin consecuencias.
Después de recibir hace unas semanas el aval de los tribunales europeos para cruzar de Bélgica a Francia, y participar así en el pleno de Estrasburgo, Puigdemont, Toni Comín y Clara Ponsatí se ven seguros para volver a Perpiñán a darse un baño de masas. Los indultos y los protagonistas de estos serán la novedad y el principal reclamo de un acto con el que el ex presidente busca presionar a Sánchez.
Aunque en JxCAT querrían celebrar este acto este mismo verano, para así jugar con los tiempos a favor, fuentes cercanas a Waterloo consultadas por este periódico señalan que las inmediaciones de la Diada parece ser la fecha más indicada. De esta forma, añaden, el separatismo daría el pistoletazo de salida al nuevo curso político que vendrá marcado por la mesa de negociación del referéndum entre Gobiernos que Moncloa tiene que convocar en breve.
La gran incógnita del acto de Perpiñán es si estarán también los indultados de ERC. Al fin y al cabo, organizándolo bajo el paraguas del Consell per la República, en ese foro están representados todos los partidos. De ser así Puigdemont y Oriol Junqueras volverían a compartir escenario tras años y medio después.
Tal como ha relatado este viernes OKDIARIO los indultados de JxCAT quieren que Puigdemont y Junqueras vuelvan a verse las caras treinta y tres meses después de su divorcio político. La entrada en prisión del líder de ERC dinamitó todos los puentes que quedaban tendidos entre ellos.
En todo este tiempo, además, el diálogo entre Puigdemont y Junqueras se ha librado básicamente a través de los medios de comunicación o los libros que ambos han publicado. Se han acusado mutuamente de no tener preparadas las estructuras para implementar la ficticia república catalana e incluso de haber querido suspender la celebración del referéndum ilegal separatista del 1 de octubre de 2017. Con el acto de Perpiñán se pretende enterrar estos recelos y volver a unir el golpismo en torno las dos figuras más carismáticas.
Indulto avanzado
El equipo jurídico de Carles Puigdemont trabaja con la idea de un indulto avanzado. El mismo abogado que solicitó el indulto para los condenados que ya han quedado en libertad, hace más de medio año, podría registrar una nueva petición para el ex presidente. Lo está estudiando. Aunque la legislación española lo permite, lo que le permitiría volver con el perdón otorgado antes de ser detenido y juzgado, en Moncloa descartan esa posibilidad. «Si Puigdemont vuelve será detenido y deberá cumplir condena», sostienen fuentes cercanas al ministro de Justicia, Juan Carlos Campo.
Mas-Collell como cebo
Uno de los protagonistas del acto que se prepara en Francia será el ex consejero de Economía Andreu Mas-Colell, en el punto de mira del Tribunal de Cuentas. El próximo martes él y decenas de altos cargos y funcionarios tienen una cita con el auditor de la economía de instituciones y partidos. El reconocimiento internacional a la figura del ex consejero de Artur Mas, que ha recibido apoyos desde varios países, es la baza que pretenden utilizar los de Carles Puigdemont ahora para atraer atención a su acto para reivindicar su liberación de movilidad.