¿Pueden los bebés coger piojos?

Los piojos es un problema que afecta a muchos niños (y también adultos), pero ¿pueden los bebés coger piojos?. Puede que tal vez al tener poco pelo o apenas relacionarse con otros bebés, sobre todo siendo recién nacidos, no estén en riesgo, pero ¿es así realmente?.

Ciertamente,  los piojos en los bebés son bastante inusuales, pero debemos advertir que no es imposible que ocurra. En concreto, los bebés que ya nacen con mucho pelo, y que además, tienen contacto directo con otros niños que pueden tenerlos fácilmente, ya sean hermanos o tal vez compañeros en la guarderías.

Cómo identificar los piojos en los bebés

Como los bebés no pueden hablar y expresar lo que sienten, puede ser un poco más difícil de identificar que tienen liendres, de modo que lo mejor es estar atentos a las señales. Uno de lo signos que indicarían que el bebé tiene piojos es una pequeña descamación en el área del cuello y detrás de la oreja y obviamente irritabilidad sin razón aparente, a menudo tratando de rascarse la cabeza frotándose con la almohada.

En el momento en el que se identifiquen estas señales, será bueno pasar a un control de la cabeza del bebé, ya que normalmente su cabello es muy fino y en el caso de tener piojos, será fácil verlos al momento. Además, si el bebé está afectado notaremos también como la cabeza se pone roja y el cuero cabelludo está irritado.

Cómo eliminar los piojos en los bebés

En el caso de que el bebé tenga piojos, será difícil hacerle un tratamiento con lociones o champús específicos ya que su cabello y sobre todo su piel son todavía delicados, por lo que será necesario eliminar los piojos con la ayuda de una liendrera.

Procura hacer todo el proceso en un lugar bien iluminado donde sea posible ver fácilmente los piojos y las liendres atrapados en los mechones de cabello. Una buena opción es ayudarte además con una lupa.

Esta limpieza debe hacerse con cuidado y diariamente hasta que estemos seguros de que se han eliminado todo. Como es un bebé, pueden impacientarse con el movimiento del peine, así que debes tener mucho cuidado de no hacerle daño.

Si tienes un bebé muy agitado que no te permite limpiar bien su cabeza, intenta hacerlo durante una siesta, acostado en un lugar bien iluminado para facilitar el procedimiento.

Será necesario esterilizar y limpiar la almohada, las sábanas y la cuna del bebé para eliminar los posibles piojos que se les hayan caído. Se recomienda lavar toda la ropa y los lugares en los que generalmente se queda el bebé, evitando la proliferación de mascotas.

La aparición de piojos no causa problemas graves en los bebés, a pesar de que su eliminación requiere un buen esfuerzo. Sin embargo, en niños mucho mayores, existe el riesgo de infección por hongos, virus o bacterias debido a posibles heridas que el piojo termina dejando e incluso, la forma desesperada de rascarse la cabeza. Si no se tratan, pueden propagarse e incluso provocar problemas más graves.

Maneras de prevenir los piojos del bebé

La única forma de evitar que el bebé y los niños contraigan piojos es observar la cabeza de tu pequeño con frecuencia, y si hay alguna advertencia en la guardería o escuela sobre la manifestación de piojos, duplica la atención. Si algún miembro de la familia contrae piojos, se recomienda observar además a los demás miembros del hogar, incluidos el padre y la madre, para descartar la proliferación.