¡Atención primerizas! Datos interesantes sobre cuidados iniciales del recién nacido

Cualquier madre que lo sea por primera vez está llena de dudas, de temores y de incertidumbres sobre lo que es el cuidado de su bebé. Por ese motivo, no dudan en leer numerosas publicaciones referentes a eso, consultan a sus madres o suegras, preguntan a las matronas…En este caso, para ayudarte, si tú te encuentras en esa situación, vamos a darte a conocer los principales datos sobre los cuidados iniciales del recién nacido.

Toma nota y verás que siguiendo los mismos tu hijo va a estar encantado:

1-Las manos

La primera información que es fundamental que sepas y que asumas como una de las acciones imprescindibles que debes acometer es que es necesario que tengas una buena higiene de manos. Con esto nos referimos a que antes de coger al pequeño y darle las atenciones necesarias te laves las manos y también que debes hacer lo mismo después de haberle, por ejemplo, cambiado el pañal.

De esta manera, estarás velando por la seguridad y la salud de tu pequeño y de ti misma,

2-El cordón umbilical

Uno de los aspectos que más preocupa a cualquier mamá primeriza es el cuidado del cordón umbilical. Y es que este es muy sensible, requiere cuidados especiales y necesita máxima atención para evitar situaciones tales como una infección o cualquier otra dolencia.

En este caso, los profesionales sanitarios dan una serie de pautas básicas al respecto:

• Hay que mantenerlo limpio y seco para que pueda acometer su evolución natural. Es decir, para que, como se considera normal, acabe secándose y cayéndose en un plazo de entre siete a quince días después del nacimiento.
• A la hora de bañar al bebé, hay que secar el ombligo a conciencia, para evitar que queden zonas húmedas que puedan traer consigo problemas.
• Es importante que el pañal no cubra la zona del ombligo, para que quede al aire y pueda secarse con más facilidad.
• A diario, hay que darle cuidados al cordón, haciendo uso de una gasa y de agua.
• Es fundamental que los padres estén pendientes del estado y evolución de dicha zona. Y es que se puede producir una infección que se hará visible a través de síntomas tales como enrojecimiento, hinchazón, mal olor, aparición de sangre…

3-El pañal

Ni que decir tiene que otro de los cuidados que más preocupa a las primerizas es el referente al pañal, tanto a lo que es quitarlo y ponerlo como a la manera correcta de hacerlo e incluso a la frecuencia. En este caso, los mejores consejos que se pueden otorgar al respecto son los siguientes:

• Como hemos mencionado, antes de ir a retirarlo y después de haberlo cambiado hay que lavarse las manos a fondo.
• Hay que elegir el pañal adecuado a la edad y al peso del menor, evitando que le quede demasiado ajustado, pues le generará molestias.
• Durante las primeras horas de vida del bebé, este expulsará meconio como heces. Este puede resultar muy pegajoso, por lo que se requerirá quitarlo empleando agua y jabón e incluso, si así lo indican los sanitarios, aceite mineral.
• Es importante controlar que el niño no pase demasiado tiempo con el pañal sucio, ya que eso le generará problemas a su piel.
• Para que la zona genital no se le irrite, se recomienda preguntar al pediatra qué pomada o crema recomienda en pro de que la piel esté perfectamente hidratada y sin problemas de enrojecimiento.
• No menos importante es que se evite echarle polvos de talco. Es cierto que siempre se ha considerado que los mismos ayudaban a aliviar los picores y rojeces de la zona del pañal causados por la dermatitis. No obstante, en los últimos años, se ha venido a exponer que ese producto puede llegar a dificultar notablemente lo que es la transpiración.

4-El baño

Si nunca se ha cogido a un recién nacido, está claro que bañarlo se convierte en un momento de tensión. Y es que son casi irremediables los pensamientos sobre que se va a escurrir entre las manos.

No obstante, no hay que temer. La postura más recomendable y segura consiste en colocar al pequeño de tal manera que apoye su cabeza sobre el antebrazo del adulto mientras se le sostiene por la axila.

De la misma manera, no hay que pasar por alto otros consejos igualmente interesantes como son estos:

• En los primeros días, se puede optar simplemente por lavarle en seco, pasándole una esponja con un poquito de agua.
• Hay que comenzar a lavarle por la cabeza y continuar hacia abajo, siendo lo último los genitales.
• No se le debe frotar lo que es el cordón.
• Hay que controlar muy bien la temperatura del agua, para que no supere los 37º.
• Es fundamental no hacer uso de productos tales como jabones que contengan alcohol.

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