¿Cómo dejar de dar el pecho? Consejos y estrategias
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Si bien es absolutamente fisiológico y saludable dar el pecho mientras el bebé lo solicite , también es importante tener en cuenta las necesidades y deseos de la madre, quien tiene derecho a dejar de amamantar antes del final sin culpa y sin traumas. Sin embargo, tomar la decisión puede ser algo complicado, algo que haga que la mujer se sienta culpable. Descubramos a continuación, las pautas a seguir para dejar de dar el pecho con consejos y estrategias, con las que además no desarrollar trauma alguno ni para la madre ni tampoco, para el bebé.
Cómo dejar de dar el pecho
Evaluar una elección importante como dejar de amamantar significa, para la mujer, tomarse un tiempo para reflexionar sobre cuáles son las necesidades reales y las razones detrás de esta decisión. Que duda cabe, que la lactancia materna es la mejor alimentación para el bebé, pero puede que haya llegado el momento de dejarla una vez el bebé ya ha cumplido el mínimo de edad recomendado (seis meses), o tal vez se producen otros factores que hacen que la madre se plantee dejar de dar el pecho.
Piensa que si has tomado la decisión, es debido a una elección libre pero además esta debe estar bien informada para evitar cualquier forma de culpa. Es bueno recordar que la lactancia materna establece no solo la base de la alimentación del bebé, sino también lo mejor para establecer una buena relación con el pecho. De hecho, puedes dejar de amamantar si continúa respondiendo con amor y prontitud a las necesidades de tu bebé y sin socavar la relación de confianza y aceptación construida hasta entonces.
Para ello, se desaconseja adoptar estrategias de interrupción de la lactancia que impliquen engaños ( por ejemplo, colocación de tiritas o productos de mal sabor en los pezones) o alejamiento brusco de la madre (encerrarse en otra habitación o marcharse, dejando al bebé con el papá o los abuelos, o ignorar el llanto). Este tipo de estrategias corren el riesgo de hacer que el pequeño se sienta abandonado por su madre en el momento mismo de la necesidad y de una transición tan delicada.
No olvides la edad del bebé
Una variable importante a la hora de elegir cómo dejar de amamantar es la edad del niño . La lactancia materna, como cualquier relación, evoluciona con el tiempo, y no es lo mismo amamantar a un niño de 2 o 3 años que amamantar a un recién nacido. Alrededor de los 2 años , muchos niños que parecen haber reducido su frecuencia de alimentación requieren el pecho con tanta frecuencia como cuando eran recién nacidos. Es un período lleno de cambios y descubrimientos, en el que el niño necesita encontrar en la relación con la madre esa base segura que le permita explorar libremente el mundo.
Por ello dependerá mucho del tiempo empleado en esa alimentación del bebé, de modo que la clave está en tomar la decisión y una vez hecho, asesorarte bien con el médico para que te de pautas ya que con un bebé de seis meses será menos complicado, que con un niño (que duda cabe) de dos años o más.
Consejos para dejar del pecho si el bebé tiene dos años
En este caso de hecho, debes tener en cuenta dos consejos clave: No ofrezcas si el bebé no lo pide, ya que aunque puede parecer trivial, una madre que amamanta hasta el segundo año de vida de su bebé acostumbra a utilizar el ofrecimiento del pecho como estrategia para manejar innumerables situaciones, pero si no lo ofreces, ayudarás al niño a comprender que puede haber diferentes respuestas a sus necesidades.
El otro consejo será tratar de distraer al niño, dado que suele ocurrir que los niños piden el pecho por aburrimiento, por costumbre o por el placer de un abrazo de su madre. Sin embargo, para poder distraer al bebé del pecho, es importante «jugar con antelación»: el bebé difícilmente se distraerá con una petición que ya ha comenzado.
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