Sucesos

Detenido por masturbarse ante varios menores en los baños de un centro comercial de Sevilla

centro comercial Sevilla
Imagen de una detención de la Policía Local de Sevilla.

La Policía Local de Sevilla ha detenido a un hombre de 36 años por exhibicionismo tras mostrar sus genitales ante varios menores de edad y masturbarse delante de ellos en los aseos de un centro comercial de la capital hispalense.

Los hechos tuvieron en la tarde de este pasado sábado. Según ha detallado la Policía Local, los agentes fueron alertados por el personal de seguridad privada de un centro comercial de Nervión, que relataban que el arrestado había sido sorprendido por un familiar de un niño de ocho años «mientras realizaba exhibicionismo, al tiempo que se masturbaba ante éste y otros menores de edad en el interior de los aseos».

Los agentes detuvieron al varón y le trasladaron a dependencias policiales, comprobando que tiene a sus espaldas antecedentes por otros delitos y que al parecer frecuentaba la zona.

Se trata del segundo caso de exhibicionismo en Sevilla capital en apenas unos días. La Policía ya detuvo a un varón de 60 años por acosar a dos jóvenes y masturbarse delante de ellas en la calle Torneo. Las chicas no dudaron en grabar el execrable hecho y difundir las imágenes en redes sociales. El individuo contaba con antecedentes por abusos sexuales y una orden de alejamiento sobre una menor.

Detenido en Málaga por exhibicionismo

También hace escasos días, en este caso en Málaga, la Policía Local detuvo a un hombre de 30 años como presunto autor de un delito de exhibicionismo ante menores.

Los hechos tuvieron lugar sobre las 21:15 horas del pasado jueves 16 de marzo en una vivienda ubicada en calle Virgen del Rocío, cuando se recibió llamada a la Sala 092 de la Policía Local de Málaga en la que se informaba de que un individuo estaba llamando a una vivienda mostrando sus genitales.

Tras tener conocimiento de los hechos, una dotación se personó en el lugar, comprobando los agentes a su llegada que había un hombre tirado en el suelo con una herida sangrante en la cara, encontrándose consciente y en aparente estado de embriaguez, por lo que procedieron a prestarle auxilio.

Mientras uno de los funcionarios se quedaba con él, su compañero se entrevistó con la requirente, quien le manifestó que el arrestado comenzó a tocar en la ventana de su domicilio, asomándose su hija y su sobrina, ambas menores, observándolo con el pantalón bajado y exhibiendo sus genitales.

Tras ello, según el citado relato, el individuo accedió al interior del bloque, llamando a la puerta del domicilio, ante lo que salió a recriminarle su actitud e informarle de que iba a llamar a la Policía, respondiendo éste riéndose y marchándose a la carrera, con tal suerte que cayó en su huida y se golpeó en la cabeza.

Los policías locales se percataron de que las menores estaban afectadas por los hechos, llorando y en estado de nerviosismo. Además, otra mujer se acercó a los agentes y les manifestó que el individuo la había estado siguiendo esa mañana en la misma calle, llegando a asustarse y a refugiarse en un bar de la zona.

Los agentes procedieron a la detención del susodicho y a su traslado a un centro de salud para ser asistido. Posteriormente fue llevado a dependencias policiales para ser puesto a disposición judicial.

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