Tal y como ocurrió con el IVA de las mascarillas, ahora el Gobierno socialcomunista se vuelve a escudar en Europa para no reducir este impuesto en el recibo de la luz. En plena ola de frío, España va a experimentar una subida del 22% en el recibo de la luz. Bajarlo no entra en los planes del Gobierno. Según la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, una reducción del IVA sobre el recibo de la luz «no estaría en línea con lo que se marca por parte de Europa».
Una idea que no explicaría por qué Portugal sí ha podido rebajar del 23% al 6% este impuesto recaudatorio en el recibo de la luz. Lo cierto es que dos tercios de la factura de la luz dependen de lo que decida el Gobierno. Estos dos tercios que componen el recibo son los peajes (amortizaciones, transporte, bono social, subvenciones a renovables…) y el IVA. Ambos regulados por el Ejecutivo.
Este impuesto en el recibo de la luz es uno de los más altos de Europa. Mientras Alemania tributa este bien al 19%, Francia al 5,5%, España lo hace al 21%.