¿Por qué estás en peligro si tienes fotos o vídeos sexuales en tu móvil?

El vídeo viral en el que el presentador de Got Talent, Santi Millán, aparece practicando sexo con una mujer rubia desconocida ha puesto sobre la mesa un acto delictivo. No todo vale en redes sociales y menos cuando se trata de la vida privada de una persona. El ejemplo de este presentador que ha visto como medio país ha visto un vídeo que forma parte de su más estricta intimidad es muy claro. Si tienes en tu teléfono o dispositivos contenido de carácter sexual o privado de terceras personas, sin su autoriación, estás cometiendo un delito.

Tener fotos o vídeos sexuales en tu móvil te pone en peligro

El caso de Santi Millán ha trascendido al tratarse de un personaje público, pero realmente todos nosotros estamos expuestos a pasar por una situación similar. Todos podríamos ser victimas sin saberlo de un delito que implica tener fotos o vídeos sexuales en un teléfono sin el consentimiento de las personas que aparecen en ellos.

Un día de playa haciendo toples o disfrutando de alguna de las zonas nudistas de este país, una aventura romántica en un jakuzzi al aire libre o un simple cambio de ropa en un probador pueden generar contenido delictivo. Sin saberlo, podemos ser unas víctimas, como el propio Santi Millán, que ha visto como uno de sus vídeos ha acabado en redes sociales siendo compartido por cientos de personas.

La ley es muy clara sobre compartir o tener fotos o vídeos sexuales en tu móvil

¿Te parece divertido jugar con la #intimidad de las personas?

Podrías ir a la cárcel👉 Difundir fotos o vídeos sin el consentimiento de quienes aparecen, especialmente cuando afecta gravemente a su intimidad, está penado con años de prisión#Respeto #DELITO

— Policía Nacional (@policia) June 20, 2022

El artículo 197.7 del código penal español marca penas de prisión entre tres meses a un año, o multa de seis a doce meses para todos aquellos que «sin autorización de la persona afectada, difunda, revele o ceda a terceros imágenes o grabaciones audiovisuales de aquella que hubiera obtenido con su anuencia en un domicilio o en cualquier otro lugar fuera del alcance de la mirada de terceros, cuando la divulgación menoscabe gravemente la intimidad personal de esa persona».

Por lo tanto, siguiendo el post de la Policía Nacional, compartir o difundir contenido de cualquier tipo, sin autorización es un delito que implica penas de cárcel. En el caso del vídeo de Santi Millán, el carácter sexual implica una pena mayor al vulnerarse por completo la vida privada de un personaje público. El presentador ya ha empezado con las acciones legales que ponen de manifiesto la facilidad con la que se puede compartir este contenido, antes de que llegará a manos de los agentes, el vídeo se ha viralizado por todo el país.