Receta de Torrone dei morti: delicioso turrón napolitano de chocolate y avellanas

El turrón del muerto (Torrone dei morti) es un dulce que se consume en la región de Nápoles el día de Todos los Santos y es muy peculiar, pues está compuesto de una masa con muchísimo chocolate y tiene forma de ataúd. Este turrón napolitano es una de las recetas que se elaboran para el día de Todos los Santos, en la creencia de que los muertos también degustan lo que comen los vivos. Así nacieron muchos dulces que se conocen como “dulces de los muertos”, los que son diferentes en las diferentes regiones de Italia.

La siguiente receta es para preparar turrón en un molde grande, alargado (de plum cake) de aproximadamente 25 centímetros. Si usas un molde más pequeño, no olvides dividir la masa en porciones adecuadas, para obtener varios turrones pequeños.

Ingredientes:

Preparación:

1. Derrite el chocolate amargo a baño María y vuélcalo sobre el molde previamente forrado con papel de horno, moviendo el molde para cubrir el fondo y los bordes. Si usas un molde de silicona, no será necesario que lo forres. Reserva un poco de chocolate.
2. Coloca el molde en el refrigerador para que la cobertura se endurezca mientras preparas el relleno.
3. Pon la pasta de avellanas en una cacerola y agrega el chocolate negro junto con 1 cucharada de agua.
4. Calienta a fuego suave revolviendo con frecuencia hasta obtener una pasta suave.
5. Saca el molde del refrigerador, vierte algunas avellanas y cúbrelas con chocolate. Vuelve a repetir el procedimiento colocando capas alternadas de frutos secos y chocolate hasta que se termine el relleno.
6. Vuelve a colocar en la nevera durante media hora.
7. Pasado ese tiempo, saca el molde y cúbrelo con el chocolate amargo que has reservado.
8. Alisa bien la masa utilizando una espátula o la parte posterior de una cuchara.
9. Coloca en el refrigerador y espera unas cuantas horas antes de desmoldarlo.

Esta es una receta clásica, pero se puede variar el relleno. Pueden usarse nueces, avellanas, almendras u otros frutos secos o confitados, a gusto del cocinero. Pero no solamente se debe tener en cuenta el sabor, sino también la decoración, pues el turrón se corta en rebanadas y resulta muy bonito a la vista. Especialmente para los amantes del chocolate, quienes no se pueden resistir a este manjar.

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