La zurda internacional
Milei ha hecho más daño a Sánchez y al PSOE de lo que parece. Tanto duele al sanchismo procesional que el mundo sepa de las corruptelas de Begoña gracias a la lengua irrefrenable y desacomplejada del presidente argentino, que en un alarde de ingenio comunicativo, ma non troppo, se encargan una auto campaña de argumentum fellationis en la que hablan del orgullo de ser zurdo.
En su inefable propaganda leninista, tan eficaz como fútil, tan falsa como efectista, intentan demostrar al populacho domesticado en la apatía y el conformismo que con mano izquierda, el Gobierno ha conseguido hitos políticos para la justicia social, la igualdad y la convivencia de otro modo inalcanzables. Como la mitad de España que inhala feligresía y subsidio se traga cada día el cuento que los creadores del ídem le lanzan, no repara en una verdad mucho menos romántica. Veamos la realidad de esos supuestos logros.
Subraya el vídeo socialista que, gracias a la mano zurda, España ha conseguido 140.000 millones de euros de fondos europeos. Lo que no cuenta el No-Do de Moncloa-Ferraz es que nadie sabe el destino de ese dinero, ni siquiera los propios comisarios europeos, que reclaman una y otra vez el paradero del parné, con el silencio por respuesta. Es decir, el PSOE se ha quedado la pasta que Europa nos enviaba para revitalizar económicamente a las empresas, modernizarlas, digitalizarlas y ayudar a autónomos y familias a superar los efectos de la pandemia y lo ha repartido a conveniencia entre amigos y familiares. Zurderío del viejo, socialismo del bueno. Pero sigamos.
La pieza audiovisual, perpetrada con malévola creatividad comunicativa y que, como buen artefacto de venta goebbelsiana, haría las delicias de Leni Riefenstahl, habla de los derechos conquistados por la izquierda, que es como contar los unicornios apadrinados por Yolanda Díaz. En España, bajo el Gobierno del PSOE, y de Podemos, y de Bildu, y de Esquerra Republicana de Cataluña, ningún derecho se ha creado que suponga progreso y evolución del país. Ya sabemos que la izquierda actual delega la creación de avances generales en la derecha, que a su vez delega la comunicación y venta de éxitos nacionales y externos en esa izquierda tan incompetente como inmoral. Pero esa es otra cuestión.
Sin embargo, el informativo de Intxaurrondo olvida que, bajo estos gobiernos de izquierda, sí que se han perdido derechos, adquiridos y recogidos en la Constitución, como por ejemplo la presunción de inocencia del hombre, gracias a leyes totalitarias e infames como la ley suelta violadores del sólo sí es sí, o la condición de igualdad de los ciudadanos españoles, residan donde residan, eliminada con la aprobación de la ley de amnistía. O también el derecho a la vida, con la aprobación del aborto como avance y progreso y no como tragedia regresiva.
Uno llega a la conclusión de que la internacional zurda del trinque, la ruina y el asesinato, la tríada virtuosa del socialismo, vive y bebe de la propaganda educativa y el monopolio mediático (o el monopolio educativo y la propaganda mediática) como única vía de conexión con la realidad sociológica que le hace mantener su millonaria poltrona. No importa que pasen los años y cambiemos de siglo, porque los países gobernados por el buenismo de intenciones progres y salvadoras seguirán comiendo miseria, perdiendo desarrollo y dormirán felices entregando sus libertades a caudillos que les tratan como niños, les mantienen como esclavos y les apalean como perros. Como Sánchez. Como el PSOE. Por eso odian a Milei. Porque tiene razón. Y les llama, a los zurdos, por su nombre.