Te romperá el corazón: lo que siente tu perro cuando no le dejas lamerte

La relación entre los seres humanos y los perros ha sido una de las más profundas y duraderas a lo largo de la historia. Los perros, además de ser nuestros compañeros leales, también son conocidos por su forma de comunicarse y demostrar afecto. Uno de los comportamientos más comunes de los perros es lamer a sus dueños, un acto que, en muchas ocasiones, se interpreta como una señal de cariño. Sin embargo, este comportamiento, tan común como parece, ha generado opiniones divididas entre los amantes de los animales. Mientras que algunos lo ven como una muestra de ternura, otros prefieren evitarlo debido a razones de higiene o simplemente por incomodidad.

Recientemente, un vídeo de TikTok ha reavivado el debate sobre esta costumbre. En él, el dueño de un perro defiende el lamido de su mascota, argumentando que interrumpirlo podría dañar la relación emocional entre ellos. Ante tal afirmación, varios veterinarios han intervenido para ofrecer su perspectiva profesional, analizando si realmente hay un impacto emocional en los perros cuando se les impide lamer o si se trata simplemente de un comportamiento natural que se puede rederigir sin consecuencias.

El lamido de los perros: una forma natural de afecto

El debate generado por el video viral ha hecho que muchos usuarios compartan sus propias experiencias y opiniones sobre el tema. Para algunos, el lamido de sus perros es una forma de sentir su afecto, mientras que para otros, resulta incómodo. Sin embargo, más allá de las percepciones personales, los expertos coinciden en que el lamido en los perros no siempre tiene un impacto negativo en su bienestar emocional.

Según la veterinaria Liza Cahn, el lamido es un comportamiento natural que forma parte de la socialización canina y no debe considerarse un acto desesperado de búsqueda de afecto. Por lo tanto, detenerlo no implica que el perro sufra un daño emocional, siempre y cuando se establezcan límites claros y se redirija su atención hacia otras actividades.

Además, las preocupaciones sobre la higiene y los posibles riesgos para la salud también han sido puntos importantes en la discusión. A pesar de que los casos de enfermedades transmitidas por el lamido de los perros son raros, algunos animales pueden portar bacterias peligrosas que podrían transmitir a través de su saliva.

Teniendo todo esto en cuenta, en lugar de dejar que el perro lama constantemente, los expertos recomiendan ofrecerles alternativas para expresar su afecto, como caricias, juegos interactivos o incluso sesiones de entrenamiento que fortalezcan el vínculo sin recurrir al lamido. Además, la creación de un entorno estimulante, que incluya juguetes y actividades que mantengan al perro ocupado, puede ayudar a reducir la necesidad de lamer como una forma de aliviar el aburrimiento o la ansiedad.

Riesgos para la salud

Aunque el lamido en los perros es generalmente inofensivo, hay algunos riesgos para la salud que los dueños deben tener en cuenta. La boca de un perro está llena de bacterias, algunas de las cuales pueden ser perjudiciales para los humanos. Entre estas bacterias se encuentran especies como Capnocytophaga canimorsus y Pasteurella, que, aunque son raras, pueden causar infecciones graves en personas con un sistema inmune débil.

Además, los perros que ingieren alimentos contaminados pueden portar bacterias como Salmonella y E. coli. A pesar de estos riesgos, los casos de enfermedades transmitidas por el lamido son relativamente raros, y muchos expertos coinciden en que la higiene adecuada y el cuidado regular de la salud del perro pueden minimizar estos riesgos.

Alternativas al lamido

Para aquellos que prefieren evitar el lamido pero aún desean fortalecer el vínculo con sus mascotas, existen muchas alternativas que resultan efectivas. El American Kennel Club recomienda pasar tiempo de calidad con el perro, como paseos largos, juegos interactivos o clases de entrenamiento, que no sólo ayudan a establecer una conexión emocional, sino que también promueven el bienestar físico y mental del animal.

También es posible demostrar afecto a través de pequeños gestos, como ofrecerles un juguete nuevo o una golosina especial como recompensa. Los perros, al igual que las personas, disfrutan de la atención positiva, y es importante reconocer sus esfuerzos y comportamientos adecuados. Además, asegurarse de que el perro reciba una dieta saludable equilibrada, ejercicio regular y atención médica adecuada es clave para su bienestar general, y garantiza que se sienta amado y cuidado.

En definitiva, el lamido en los perros es un comportamiento natural que desempeña un papel importante en su vida social y emocional. Si bien puede ser una forma encantadora de mostrar cariño, también es importante reconocer que cada dueño tiene sus preferencias y límites en cuanto a cómo interactúa con su mascota. Según los expertos, el lamido no debería verse como una necesidad desesperada de atención, y detenerlo no causará daño emocional a largo plazo al perro, siempre que se haga con respeto y de manera gradual.