Cercedilla denunciará a Montero y Belarra por los disturbios en la Vuelta: «Provocaron riesgo y peligro»
El Pleno insta a los servicios jurídicos a valorar si se pueden depurar responsabilidades

El Pleno del Ayuntamiento de Cercedilla ha aprobado una moción presentada por el grupo municipal Vecinos por Cercedilla para depurar responsabilidades sobre los incidentes ocurridos durante el paso de la Vuelta Ciclista a España por el municipio el pasado 13 de septiembre, entre quienes estaban Ione Belarra e Irene Montero, líderes de Podemos. La propuesta ha salido adelante con los votos en contra del PSOE y Más Madrid, a pesar de que impulsaron un comunicado municipal a favor de las acciones legales emitido el día de autos.
La moción, defendida por el concejal de Vecinos solicitaba al alcalde «rotundidad» y poner «al servicio municipal los servicios jurídicos para acabar en este tema lo antes posible». El texto aprobado exige depurar responsabilidades sobre lo sucedido y solicita a los servicios jurídicos municipales que adopten «todas las medidas legales y administrativas a disposición del Ayuntamiento para actuar con la máxima contundencia frente a los organizadores y convocantes de dichas protestas».
Según indican, «se produjeron graves alteraciones en Cercedilla provocadas por manifestaciones organizadas y convocadas por dirigentes políticas de ámbito nacional». El documento señala que «dichos hechos ocasionaron problemas de seguridad, molestias a vecinos y visitantes y una imagen pública muy negativa para nuestro municipio».
El concejal defendió durante el pleno que «respetamos siempre el derecho a la libertad de expresión, la de todo el mundo, pero esa acaba donde está afecta a la de los demás». Añadió que para algunos «es parar una carrera, para otros puede ser poner en riesgo a los deportistas».
El concejal del Partido Popular, quien presenció los hechos, relató: «Yo sí estaba abajo en la carretera jugando todo el follón. No sé cómo podéis decir que no hubo peligro. Hubo mucho peligro».
Desvío de la carrera
Los manifestantes cortaron la carretera en «la zona más estrecha» de la M-622, lo que obligó a desviar la Vuelta Ciclista a España por la M-614 hacia Guadarrama. El concejal del Partido Popular explicó que «la 614 no estaba señalizada como estaba señalizado los tramos de Cercedilla, los molinos, etcétera» y advirtió que «cualquier coche en cualquiera de los cruces de las urbanizaciones de Guadarrama podía haber salido, haberse llevado los ciclistas por delante».
La manifestación estuvo encabezada por las dirigentes políticas de Podemos Irene Montero y Ione Belarra, quienes protestaban contra la participación del equipo ciclista israelí en la competición en el contexto del conflicto en Oriente Medio. El concejal del Partido Popular señaló que su presencia ese día en Cercedilla «no fue una casualidad» y que «eso estaba era un acto ya completamente premeditado».
Posturas encontradas
El concejal del Partido Socialista se opuso a la moción argumentando que «la manifestación se desarrolló en términos de respeto y con ausencia de altercados». El edil del partido de Pedro Sánchez defendió que «estamos de acuerdo con el compromiso de libertad de expresión y el derecho de manifestación de hechos recogidos por nuestra Constitución» y añadió: «No podemos estar de acuerdo en pedir depuración de responsabilidades por altercados porque a nuestro entender no existieron».
La concejal de Más Madrid también votó en contra de la moción. Ana Puyal manifestó: «Para nosotros ese 13 de septiembre fue un orgullo y estamos viendo como las consecuencias de ello, al igual que en un montón de otras ciudades del mundo, han repercutido no solo a nivel nacional, sino internacional». Puyal citó ejemplos de otras competiciones ciclistas que posteriormente han excluido al equipo israelí, como la Vuelta Gallega o Gran Camiño y el Giro de Emilia.
Repercusión internacional
El concejal del Partido Popular subrayó la dimensión mediática del incidente: «La Vuelta ciclista a España se retransmite en directo o en diferido para 178 países. El ridículo que hizo Cercedilla el día 13 de septiembre fue, bajo mi punto de vista, espantoso».
El grupo Juntos por Cercedilla apoyó la iniciativa de Vecinos. El concejal Enrique Campillo recordó que su grupo hizo «un primer comunicado que se titulaba Quien siembra vientos recoge tempestades porque el equipo de Gobierno de PSOE, Grupo Independiente –que ostenta la Alcaldía– y Más Madrid llevaban meses alentando el odio contra Israel en apoyo a Palestina, a Hamás y trasladando el conflicto internacional a nuestras calles».
La moción aprobada incluye un tercer punto que «reitera el compromiso de este Ayuntamiento con el respeto de los eventos deportivos, la seguridad de los vecinos y visitantes y la buena imagen de Cercedilla, defendiendo siempre la libertad de expresión y el derecho de manifestación, pero subrayando que dichas libertades deben ejercerse con respeto y sin alterar el orden público».
El concejal de Vecinos concluyó su intervención señalando que el conflicto «nos alarma a todos, nos parece estremecedor. Las imágenes de niños sufriendo, de la población civil sufriendo, pues no nos gusta, pero tampoco nos corresponde a ninguno de los que estamos aquí ponerle el adjetivo genocidio».
Los disturbios también se replicaron en el centro de Madrid. En ese ámbito, el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida (PP), también avanzó que se estudiarían todas las posibilidades. Por ahora en el Palacio de Cibeles, sede del Gobierno local, no han tomado una decisión final al respecto.