La ‘offshore’ panameña de un chavista se llevará 6,4 millones del rescate público a Plus Ultra
Un informe enviado a la Comisión Europea alerta del posible uso fraudulento de la subvención de 53 millones del Gobierno
La SEPI deja la puerta abierta para que una parte de la ayuda a Plus Ultra se destine a amortizar un préstamo
Panacorp, que maneja bonos basura, puede recuperar así los 6,4 millones prestados a la aerolínea
La empresa Panacorp, ubicada en el paraíso fiscal de Panamá y dirigida por el chavista Mohamed Ibrahim, se llevará 6,4 millones de euros del rescate público de la aerolínea Plus Ultra, un rescate de 53 millones que ha tenido el visto bueno del Gobierno de Pedro Sánchez al considerar a la compañía aérea como «estratégica» y «española», según afirmó la ministra de Hacienda, María Jesús Montero.
Gracias a una excepción en el contrato entre Plus Ultra y la SEPI, la offshore Panacorp, acreedora de Plus Ultra, puede exigir cuando quiera recuperar sus 6,4 millones de euros prestados a la aerolínea. Panacorp está dirigida por el sobrino de un conocido chavista, que la maneja a través de otra sociedad interpuesta.
¿Cómo es posible que parte del rescate público español acabe en manos de empresarios con fuertes vínculos con la dictadura de Maduro ? Porque el director y tesorero de la empresa Panacorp, compradora de parte de esa deuda, es el venezolano Mohamed Ibrahim, sobrino y socio de Camilo Ibrahim. Camilo es socio en otros negocios de Rodolfo Reyes, máximo accionista de Plus Ultra. Y Reyes es la mano derecha de la vicepresidenta venezolana Delcy Rodríguez. Este entramado de amistades, parentescos y relaciones entre empresas dejan claro en manos de quién estará el dinero que España ha dedicado para rescatar a Plus Ultra.
La mecánica es sencilla y eficaz: Petróleos de Venezuela (PDVSA), empresa estatal, necesita cash de manera urgente para sostener el régimen de Nicolás Maduro en la Presidencia de Venezuela, y pone en el mercado bonos por valor de 6,4 millones de euros. Los bonos de deuda estatal venezolana tienen una calificación D, de los peores del mercado, mientras que los de la petrolera PDVSA tienen la calificación de C, sólo un peldaño mejor o menos malo. Así que es complicado colocarlos en el mercado financiero normal.
El Gobierno venezolano encarga la venta de esos bonos que nadie quiere a la empresa panameña Panacorp. Así escapa de controles ordinarios recurriendo a una compañía que opera desde un paraíso fiscal.
¿Y qué hace Panacorp con el capital obtenido de esa venta? Lo coloca en una empresa manejada por socios cercanos al chavismo: Plus Ultra, a cargo de Rodolfo José Reyes Rojas, el empresario cercano a la vicepresidenta Delcy Rodríguez.
La operación implica la compra ‘ficticia’ de una parte de Plus Ultra por el mismo valor de la deuda venezolana adquirida: 6,4 millones, pero no se deposita ni un tercio de esa cantidad, dejando en el limbo, según el informe presentado por Luis Garicano, el resto de la compra.
¿Y puede Panacorp ahora pedir la devolución de su falsa inversión usando la ayuda del Estado español a Plus Ultra? Sí.
En el artículo 12.1.1. del Contrato de Financiación entre Plus Ultra y la SEPI se establece que “no se podrán transferir fondos a cualquier tercero distinto de la beneficiaria”, pero hay una salvedad: “Que respondan a operaciones comerciales en las condiciones usuales de mercado, respondiendo a razones legítimas y en cumplimiento de la normativa vigente que sea aplicable”.
Esto es como decir nada o dejar el campo libre, ya que significa, en opinión del eurodiputado Luis Garicano, firmante del informe presentado ante la Comisión Europea, una falta de compromiso por parte de Plus Ultra de “evitar que el dinero de todos los contribuyentes se utilice para pagar la deuda de una empresa de dudosa reputación”, a la vez que ya se han satisfecho los intereses anuales de 2019 y 2020. Usando esa excepción, Panacorp puede exigir recuperar sus 6,4 millones de euros. Los mismos que se usaron para comprar deuda venezolana y que acabarán en manos de el entramado de empresarios afines al régimen de Maduro.
Relaciones peligrosas
La relación de Ibrahim con el Gobierno de Maduro viene a través de su tío Camilo Ibrahim, amigo y socio en muchos negocios de Rodolfo Reyes, consejero de Plus Ultra. Además, Camilo Ibrahim controla Panacorp a través de la compañía Panam Capital Markets S.A.
Los accionistas de Plus Ultra, los venezolanos Roberto Roselli y El Arigie Harbie Raif, también coinciden en varios consejos de Administración de empresas venezolanas y españolas y dentro de la propia Plus Ultra. Tanto Rodolfo Reyes como Camilo Ibrahim fueron llamados a declarar en la Asamblea Nacional de Venezuela por un presunto fraude en la compra-venta de alimentos.
Plus Ultra se defiende
Plus Ultra debía devolver este capital a los prestamistas de Panacorp en cuatro años, que vence el 31 de diciembre de 2021, pero se prorrogó otros cinco años hasta el 2026.
El informe elaborado por Garicano y entregado a la Comisión Europea sostiene que “en tres años se habría pagado en intereses el total de la cantidad efectivamente prestada, siendo probable además que ese sea el destino de parte de la ayuda concedida por el Reino de España”.
El mismo miércoles que se conocían las alegaciones las aerolíneas aéreas salían al paso de estas informaciones y desmentía “categóricamente” las, a su juicio, numerosas “falsedades y manifestaciones calumniosas” del portavoz de Ciudadanos en Europa.
Según la aerolínea, entre otras alegaciones, Garicano afirma, «rozando el absurdo», que un préstamo de una entidad financiera concedido a Plus Ultra en 2017 fue una «maniobra de ingeniería contable» para conseguir una ayuda pública que «ni siquiera existía entonces».
En opinión de Plus Ultra, la afirmación más grave se produce cuando el eurodiputado achaca a la compañía la comisión de un delito al sostener que «el préstamo participativo de Panacorp era simulado». Para la compañía, es «una afirmación falsa, extremadamente grave» que Garicano «no puede ni podrá demostrar, ya que Plus Ultra nunca ha incurrido en tal práctica» y es un préstamo correctamente concedido y formalizado, siguiendo todos los cauces legales necesarios, cuyo importe fue totalmente utilizado por la aerolínea para garantizar su liquidez en 2018.
Plus Ultra Líneas Aéreas pide formalmente a OK Diario que incluya la siguiente aclaración remitida a este medio