Trump fue tiroteado tres veces antes de que actuaran los agentes de la Casa Blanca que lo escoltaban

El intento de asesinato que ha sufrido Donald Trump ha puesto en evidencia la eficacia del dispositivo de seguridad que tiene que velar por su integridad física, a cargo de los agentes del Servicio Secreto de la Casa Blanca. El candidato republicano y ex presidente fue tiroteado en tres ocasiones antes de que los agentes del Servicio Secreto intervinieran. Fue él mismo quien se lanzó al suelo para protegerse, tras escuchar una primera detonación y sentir que le habían alcanzado en su oreja derecha.

Trump se lanzó al suelo mientras se escucharon nítidamente otros dos disparos contra él. Fue en ese momento cuando los agentes se abalanzaron a protegerle, mientras otros, junto a policías de élite, trataban de neutralizar al atacante, que fue abatido. En ese intervalo se escucharon al menos otros cinco disparos, aunque todavía no se ha aclarado oficialmente si esos tiros fueron obra del tirador que intentó matar a Trump o si se cruzaron disparos de respuesta de los agentes que tenían que proteger al ex presidente y candidato republicano a la reelección.

El atentado que ha sufrido Trump pone en tela de juicio la eficacia del dispositivo de seguridad que se había desplegado para esta intervención de Donald Trump en plena carrera electoral para volver a la Casa Blanca. En primer lugar, porque un individuo logró colocarse a corta distancia de Trump en el mitin portando un arma, sacarla y disparar al menos tres veces contra Trump con suficiente certeza como para alcanzarle en la cabeza. Por milímetros, el candidato republicano ha salvado la vida. El proyectil le alcanzó en la oreja derecha. Unos milímetros más y le habría alcanzado fatalmente en el cráneo.

El tirador fue localizado en la cubierta de un pequeño edificio de una planta situado a corta distancia del escenario en el que intervenía Donald Trump. Una cometido básico de los servicios de seguridad es vigilar precisamente los edificios o instalaciones próximas a un potencial objetivo, más aún si, como es el caso, tienen línea visual directa con el lugar en el que el protegido va a estar al descubierto.

El congresista republicano por Pensilvania, Dan Meuser, que estaba en primera fila cuando se produjo el intento de asesinato de Trump, ha relatado que escuchó «entre ocho y diez disparos» y que «parece que varias personas de la multitud pudieron haber sido alcanzadas y estaban en el suelo». Luego se confirmó que uno de los asistentes había muerto.

Dan Meuser se encontraba en primera fila, a muy escasa distancia de Trump, que se encontraba en el escenario pronunciando el mitin cuando dispararon contra él. Junto a Meuser estaba también, entre otros, el candidato republicano al Senado por Pensilvania, Dave McCormick.

Como candidato a la Casa Blanca, Donald Trump tiene asignado un equipo de seguridad formado por miembros del Servicio Secreto, que son también los encargados de la protección de los presidentes de Estados Unidos, de su familia y de altos cargos de su gabinete.