Samu Saiz y Carlos Briones ante el juez: «Nuestro único delito ha sido jugar a la Play»
A preguntas de su abogado, ambos jugadores de fútbol han negado cualquier tipo de vinculación con la trama organizada entorno a los amaños de encuentros de la liga española. Tras su declaración ambos quedan investigados, solamente, por un delito de corrupción entre particulares.
Los futbolistas Saiz y Briones defenderán "categóricamente" su inocencia en el caso de amaños de partidos
Los futbolistas Samu Saiz y Carlos Briones se han mostrado categóricos: «Nuestro único delito ha sido jugar a la Play». Ambos jugadores se sentaban este miércoles ante el juez de la ‘Operación Oikos’, Angel Manuel de Pedro Tomás, para aclarar su papel en el amaño, fallido, del encuentro de 3ª división entre los clubes aragoneses Sariñena y Cariñena, durante la última jornada de liga de la temporada 2017-2018.
Los dos han negado al magistrado instructor haber tenido ningún tipo de trato o vinculación con los presuntos cabecillas de la trama creada para «predeterminar resultados de partidos de fútbol» -Raúl Bravo y Carlos Aranda- a los que no han entregado ninguna cantidad de dinero «jamás».
Tal es así que hasta la fecha «no ha podido acreditarse ninguna transferencia» efectuada por su parte hacia estos o a Iñigo López, a quien los investigadores sitúan como intermediario en el proceso diseñado por Aranda y Bravo. Y no se dice «a qué apuesta ilegal correspondería» la misma «si la hubiera», subrayan los futbolistas al magistrado. «Precisamente estamos aquí por no haber querido pagar una deuda a Carlos Aranda», remarcan, «que nada tiene que ver con irregularidades ni con amaños de partidos».
Tras su declaración ambos futbolistas quedan investigados, solamente, por un delito de corrupción entre particulares
Samu Saiz y Carlos Briones han reconocido que se «conectaban para jugar a la videoconsola» con frecuencia y que interactuaban on-line para descargarse actualizaciones de dos conocidos videojuegos -el Counter Strike y el Call of Duty- pero que en ningún caso se trataba ni de lenguaje encriptado, ni de palabras en clave para referirse a amaños de marcadores de encuentros deportivos, fundamentalmente futbolísticos, como sostienen los investigadores en su atestado policial.
Palabras en clave
Saiz y Briones se han mostrado tranquilos durante su comparecencia en el Juzgado de Instrucción número 5 de Huesca, durante la cual han tratado de desvirtuar las palabras en clave que se recogen en el informe policial y que, a juicio e los investigadores, serían utilizadas por ambos -entre ellos y con el resto de investigados- en la presunta trama creada para amañar resultados de partidos de fútbol y desvirtuar las apuestas legales sobre los mismos.
Ambos han asegurado que «los servidores del FIFA no están disponibles» -que en el atestado se vincula a la caída de la plataforma virtual en la que se efectuaban las apuestas- era una mera referencia a la descarga de las actualizaciones del juego que, en un momento determinado, no pudieron materializar.
«Tres menús a 3.500» una inocua referencia a los torneos on-line que jugaban entre ellos -y con otros compañeros- en los que apostaban cantidades legales que, bajo dicha expresión, trataban de ocultar a la mujer de Briones que: «Señoría, no me deja apostar en Internet».
Escuchas ilegales
El abogado de la defensa de Saiz y Briones, el penalista Juan Gonzalo Ospina, ha interesado al juez la nulidad de las escuchas telefónicas que han llevado a ambos jugadores a sentarse en el banquillo como investigados y que estos no reconocen.
Fuentes judiciales confirman a OKDIARIO que las mismas se habrían iniciado en el año 2017, cuando el auto de incoación de diligencia previas está fechado en 2018 y el inicio del procedimiento judicial data de este mismo año. Motivo por el que el letrado sostiene que la causa contra sus clientes es «prospectiva» y deriva de un procedimiento anterior, en Málaga, que nada tiene que ver con sus representados.
Ospina solicitará el archivo de la causa contra Samu Saiz -que declaró voluntariamente ante la policía de Ibiza tras ser detenido- y Carlos Briones ya que «no hay pruebas incriminatorias contra ellos». Por el momento, ambos futbolistas han quedado investigados en la causa judicial sólo por un delito de corrupción entre particulares.