ESTADO DE ALARMA EN MADRID

Marlaska despliega más de 7.000 agentes para enjaular a los madrileños bajo el estado de alarma

Pasadas las tres de la tarde, y anunciado ya el decreto de estado de alarma, la Policía y la Guardia Civil no habían recibido la Instrucción de Interior con las órdenes.

toque de queda
Control policial en el acceso a la capital. Foto: EP

El ministro del Interior, Fernando Grande-Maraska, ha explicado en el Palacio de La Moncloa que el Gobierno va a emplear más de 7000 efectivos de Policía Nacional y Guardia Civil para hacer cumplir el estado de alarma y cerrar Madrid desde hoy mismo y durante 15 días. Marlaska habla de las medidas «precisas y necesarias» exclusivamente para hacer cumplir el decreto en Madrid y en las ciudades a las que afectaba la orden del ministerio de Sanidad anulada por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid el jueves. «Sólo damos -ha dicho junto al ministro Salvador Illa- cobertura legal y seguridad a lo que ya había».

Marlaska ha explicado que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado lo van a hacer «con la misma profesionalidad que hasta ahora con la misión esencial de preservar la salud de los ciudadanos». Los controles de la Policía y la Guardia Civil se establecerán en las entradas y salidas de las ciudades afectadas y «sin merma -asegura el ministro- de los servicios habituales que prestan». «Las sanciones -ha señalado Marlaska- se aplicarán con los criterios de proporcionalidad y necesidad imprescindible». «Las multas no tienen un fin recaudatorio; sólo defender la salud de los ciudadanos», ha asegurado.

Serán más de 7.000 agentes de Policía Nacional y Guardia Civil -cada uno en su ámbito de competencia- para cerrar el perímetro de la capital y de las ciudades afectadas con ayuda de sus policías municipales. Se evitarán también las entradas y salidas de Madrid por la estaciones de Atocha, Chamartín y Méndez Álvaro y el aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid Barajas. Los agentes estarán al mando del ministro del Interior y no de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, pese a que el Gobierno ha asegurado en numerosas ocasiones que los presidentes autonómicos serían, en caso de estado de alarma, la autoridad delegada.

Pasadas las tres de la tarde, y anunciado ya el decreto de estado de alarma en Moncloa, fuentes policiales afirman que no tienen aún ninguna Instrucción por escrito del ministerio del Interior. El ministro Marlaska ha dicho en la rueda de prensa que el dispositivo estaba previsto desde hace días, pero las fuentes policiales consultadas por OKDIARIO mostraban a mediodía su desconcierto por no conocer los detalles del operativo a la espera de saber dos elementos esenciales: quién iba a ostentar el mando del estado de alarma y el alcance geográfico del mismo. «Nosotros somos el último eslabón y aún no sabemos nada», señalaban a las 12 del mediodía fuentes policiales. «Dada la premura de tiempo -decían las fuentes policiales- el objetivo es evitar un éxodo masivo de madrileños por el puente del 12 de octubre». Las fuentes policiales y de la Guardia Civil consultadas transmitían poco después -una hora antes de la rueda de prensa en Moncloa- sensación de enfado por la «improvisación» -decían- de una medida ya conocida y anunciada anoche por el diario El País.

El operativo -ha asegurado el ministro Marlaska- es idéntico al de estos días pasados. El Tribunal Superior de Justicia de Madrid anuló la medida por entender que la Orden Ministerial de Sanidad de cerrar Madrid vulneraba derechos fundamentales, el primero el del libre tránsito. Desde ese momento, Interior destaca que los controles policiales fueron cancelados. El ministro Illa y el ministro Marlaska han recalcado en la rueda de prensa de Moncloa que lo que se hace ahora es darle «cobertura legal» a aquellas medidas del ministerio. «Le estamos dando un marco legal de seguridad a aquellas medidas. Lo que había que hacer se ha hecho», han señalado Illa y Marlaska.

«Es un escenario complejo y preocupante el de Madrid y confío en que las medidas surtan efecto en tres semanas», ha dicho el ministro de Sanidad. El ministro ha acusado al gobierno regional de no hacer «nada de nada» en las últimas horas, pese a las advertencias desde Moncloa. «La paciencia tiene un límite», ha señalado. Illa ha acusado a la Comunidad de Madrid de «retrasar» la entrega de datos de la pandemia al Gobierno. El ministro ha asegurado que es «indiscutible» que en Madrid «hay transmisión comunitaria» y que «podemos cruzarnos de brazos o frenar al virus».

«En los hospitales -ha continuado- la situación es difícil para los pacientes y para los sanitarios». Y ha ido a más: «No hay más ciego que el que no quiere ver». Si las medidas no son efectivas en 15 días, Illa ha anunciado que el Gobierno acudirá al Congreso a solicitar una prórroga. También ha matizado que si alguna nueva ciudad de Madrid cumple con los parámetros para ser cerrada, el Consejo de Ministros lo hará.

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