Irene Montero dio un premio a la nueva fiscal general por aplicar «justicia feminista»
Igualdad valoró de Teresa Peramato su capacidad de "aplicar las leyes con perspectiva de género"
La ex ministra de Igualdad Irene Montero premió en 2021 a la nueva fiscal general del Estado, Teresa Peramato, por aplicar «justicia feminista». El Gobierno de Pedro Sánchez entregó a la entonces Fiscal de Sala Delegada de Violencia sobre la Mujer el reconocimiento en la lucha contra las violencias machistas hace cuatro años, los llamados premios Meninas.
La delegación de Gobierno contra la Violencia de Género, entonces encabezada por la jueza de profesión Victoria Rosell, entregó este galardón para la categoría Justicia feminista a la recientemente nombrada fiscal general del Estado. Entonces, la cartera de Igualdad justificó esta distinción en «su imprescindible labor de aplicación de las leyes con perspectiva de género e infancia».
La entrega de premios tuvo lugar el 24 de noviembre de aquel año, un día antes del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Entonces, la nueva fiscal general lanzó un mensaje «a todas las mujeres que están sufriendo violencia». «Que confíen en la justicia, que confíen en la Fiscalía porque estamos para ayudarles», aseguró.
Sin embargo, apenas un año después de aquel discurso, se aprobó la Ley Orgánica 10/2022 de garantía integral de la libertad sexual que permitió la excarcelación de más de 100 violadores y redujo la pena a otros 1.000 agresores sexuales. Una norma que Peramato defendió en aquellos momentos alegando que tenía «muchísimas cosas buenas».
Defensora de la ley del ‘sólo sí es sí’
Peramato expuso en una entrevista en RNE que la norma aprobada por la entonces titular de Igualdad daba «mayor protección» a las víctimas. Sin embargo, en la práctica, la ley del sólo sí es sí provocó la excarcelación de un centenar de violadores al verse reducidas sus penas y considerarse, por tanto, cumplida su medida privativa de libertad. Además, otro millar de agresores sexuales vieron recortadas sus penas y, por tanto, podrían salir antes de prisión.
En 2022, la ahora fiscal general del Estado consideró que era «prematuro» que se planteara su modificación. Porque, en su opinión, había que «apreciarla en lo que vale». Peramato subrayaba que era un «paso adelante» porque exigía el consentimiento expreso con el que se debe tener una relación sexual. A sus ojos, así se protegía a todas las víctimas, siendo «la mayoría, mujeres, niñas y niños».
Este martes, el Gobierno de Sánchez ha iniciado el procedimiento para nombrar como nueva fiscal general del Estado a Peramato. Lo ha hecho después de que el Tribunal Supremo diera a conocer el fallo por el que condenaba a dos años de inhabilitación al hasta ahora máximo representante del Ministerio Público, Álvaro García Ortiz, por revelación de secretos. La condena se basa en la filtración de un correo electrónico al que García Ortiz tuvo acceso por su puesto para atacar políticamente a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
Precisamente este martes, el ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, ha alabado a la nueva fiscal general por su «vocación feminista a la vista de todos».
El titular de la cartera plenipotenciaria ha ensalzado a Peramato asegurando que tiene una «trayectoria impecable» así como una «formación jurídica extraordinaria». En ese mismo sentido, ha puesto el acento en que goza del «reconocimiento de todos los operadores jurídicos».
A ojos del ministro de Justicia, «no hay duda de que es una persona absolutamente idónea para llevar adelante los retos» de la Fiscalía General del Estado. Entre otros objetivos, el Gobierno ha destacado que tendrá que poner en marcha el refuerzo de la «autonomía de la Fiscalía para cumplir su labor, que no es otra que perseguir el delito».