Fernández Díaz asegura que no se tiene constancia de que el terrorista fugado se encuentre en España
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El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha señalado este lunes que no existe una «mínima sospecha concreta» que conste que el presunto terrorista y uno de los autores de la masacre de París, Salah Abdeslam, quisiera desplazarse a España para huir de la justicia francesa.
Asó lo ha explicado el ministro a los micrófonos de RNE, que también ha aclarado la reunión que convocó el gobierno francés el domingo, que contó con la presencia de los titulares de Interior tanto de España como de otros países fronterizos: Italia, Holanda y Alemania. La cita tuvo como objetivo la advertencia del país galo a sus vecinos de que reforzasen los controles de seguridad en la frontera para «localizar y detener» al terrorista fugado en caso de que «pretendiese huir de territorio francés».
«No hizo un llamamiento específico a España, sino a los países fronterizos. Como estamos en la zona Schengen forma parte de la normalidad y que nos adviertan de esta posibilidad», ha agregado el ministro, que ha asegurado que los controles en la frontera con Francia se han fortalecido. «Que Abdeslam viaje a España es una posibilidad», ha Fernández Díaz, debido a que «somos un país fronterizo, pero no hay un llamamiento específico o una mínima sospecha concreta de que su interés fuera salir de Francia e ir a España».
Participó en las tareas de logística
Las declaraciones de Díaz aluden a la solicitud que se hizo desde el Gobierno de Francia de cooperación internacional en el marco del Sistema de Información Schengen (SIS), acuerdo por el cual varios países de la UE suprimieron sus controles entre sus fronteras.
Salah Abdeslam, nacido el 15 de septiembre de 1989 en Bélgica, concretamente en Bruselas, es hermano de Ibrahim, uno de los suicidas que provocaron la matanza. El sujeto no tiene antecedentes en el país galo, aunque se le considera un «individuo peligroso» según la orden emitida por Francia. Se le acusa de participar en las tareas de logística del atentado, alquilando uno de los coches que usaron el viernes los yihadistas para desplazarse por París.