Fernández desvela que su conflicto con Sánchez fue por querer pactar con los independentistas
El presidente de la gestora del PSOE, Javier Fernández, ha reconocido este martes que su distanciamiento político con el ex secretario general de su partido, Pedro Sánchez, fue por su intención de buscar un acuerdo con los partidos independentistas para llegar al Gobierno tras las elecciones generales del 20D.
«Nunca tuve un conflicto con Pedro Sánchez y a raíz de las elecciones de diciembre se produjo», ha admitido Fernández en una entrevista concedida a TVE.
En este sentido, el presidente de la gestora socialista ha recordado que él fue «uno de los dirigentes más activos en introducir la cláusula de no pactar con independentistas», en alusión a la condición que se adoptó en el Comité Federal del PSOE del 28 de diciembre que impedía negociar con los secesionistas.
«Luego él mismo lo reconoció», ha señalado Fernández en relación a la entrevista que concedió el propio Sánchez a La Sexta en la que afirmó que «cometí un error al no aceptar la abstención de los nacionalistas» puesto que el PSOE «tiene que pactar con los nacionalistas».
En este misma entrevista, el ex mandatario socialista confesó también haberse equivocado al tachar «a Podemos de populista, no supe entender el movimiento y la gente que había detrás de Pablo Iglesias», alegando a su vez que «el PSOE está obligado a trabajar codo con codo con Podemos».
«Dos visiones que se enfrentarán»
Y es que para el presidente de la gestora, dentro del partido existen «dirigentes» que se muestran en la misma línea de Sánchez de «aproximación a la confluencia más a la izquierda con apoyo de los partidos nacionalistas», mientras que otros mandatarios, entre los que se encuentra él, defienden que el PSOE sea «partido de mayorías, que sea él mismo alternativa de gobierno».
«Son dos visiones que tendrán que confrontarse, si se plantean, en el seno del Congreso», ha manifestado en alusión al próximo Congreso Federal del partido, esgrimiendo que «será bueno, razonable y serio que sea así».
Rechaza un Congreso «en carne viva»
No obstante, no ha querido avanzar la fecha de celebración de este Congreso, declarando que «primero hay que definir la línea política, y luego elegir un líder, pero por ese orden».
«Con las muy fuertes tensiones que hay en el seno del partido hacer un congreso en carne viva es como echar sal a las heridas», ha añadido, reiterando su idea de convocarlo «antes del verano».
En este contexto, ha destacado la labor de la gestora al frente del partido, recalcando que se puede hablar de «interinidad» y no de «ilegalidad».
«Soy un presidente interino en una dirección interina, pero ilegalidad de la gestora no hay ninguna», ha apostillado.
También ha restado importancia a las plataformas internas desplegadas por toda España que piden la convocatoria inmediata de primarias para decidir al próximo secretario general del PSOE.
«Le ponen demasiada pasión a una cosa de dimensión tan pequeña», ha valorado.