Se extravía el acta de sanción al bar donde estuvo Armengol y que incumplía las medidas contra el Covid
El acta de sanción por el que fue multado el bar donde se encontraba Francina Armengol, presidenta socialista de las Islas Baleares, tomándose copas de madrugada se ha extraviado. El propietario del bar no podría, de esta forma, ser sancionado por incumplir el horario de cierre recogido en la normativa de prevención contra el coronavirus, normativa que fue aprobada por el Gobierno autonómico de Armengol.
De momento, el acta no ha aparecido ni ha llegado a las autoridades competentes para sancionar este tipo de acciones, según revela el diario Última Hora. Se trata de un trámite imprescindible. Los policías locales que acudieron al lugar de los hechos deberán ratificar su versión para proceder a la sanción al dueño del local, ubicado en la calle Sant Esperit de Palma de Mallorca.
La presidenta balear, la socialista Francina Armengol, fue cazada tomando copas sobre las 02:00 horas del pasado 7 de octubre junto a otras ocho personas. En la actualidad los bares y restaurantes de Baleares deben cerrar a la 1, medida que fue aprobada por el Gobierno de Pedro Sánchez y posteriormente por el autonómico de Armengol. De esta forma, la presidenta socialista incumplió su propia normativa para tratar de frenar la expansión del coronavirus.
Dos agentes de la Policía Local de Palma acudieron a este establecimiento a las 02:10 horas por las numerosas quejas de los vecinos de la zona, tal y como asegura Última Hora. Los agentes se encontraron a nueve personas, entre ellas a Francina Armengol, en el interior del local, según consta en el acta de sanción que ahora se ha extraviado.
La actitud de la presidenta balear contrasta con las quejas que presentó este miércoles en el Parlament regional, donde aseguró que se debían realizar «nuevos sacrificios» y acusó a aquellos que no cumplían las instrucciones de «poner a todos en peligro». Además, su Ejecutivo ha anunciado que reducirán las reuniones sociales, ya sean públicas o privadas, a un máximo de 6 personas a partir de este sábado.
La versión de Armengol
Debido a la polémica originada, el Gobierno balear publicó un comunicado en el que se excusaba a Armengol y a «algunos colaboradores» que se encontraban en el local porque «en el momento de salir, el director general de Comunicación sufrió un desmayo».
La presidenta socialista, según el Ejecutivo autonómico, reunió en una cena de trabajo a un equipo de colaboradores para analizar detalladamente cuestiones relativas a la acciones de gobierno. Este encuentro se produjo en la terraza del Restaurante Cor, ubicado en la plaza del Comtat de Rosselló de Palma, a 450 metros de la residencia privada de Armengol.
En la cena participaron, según el comunicado, la consejera de Presidencia, Cultura e Igualdad, Pilar Costa; el consejero de Modelo Económico, Turismo y Trabajo, Iago Negueruela; el consejero de Movilidad y Vivienda, Marc Pons; así como el director del gabinete de la presidenta, Joaquim Torres, y el director general de Comunicación, Álvaro Gil.
Tal y como explican, finalizada la cena, abandonaron la terraza para dirigirse a sus domicilios, si bien, «de camino hacia éstas, la presidenta, el conseller de Movilidad y Vivienda, y el director general de Comunicación siguieron la conversación» y «a unos metros del domicilio de la presidenta encontraron un establecimiento abierto, concretamente el Hat Bar, y entraron».
Así, relatan que sobre la una de la madrugada, la presidenta y sus acompañantes abandonaron el establecimiento, aunque en ese momento el director de Comunicación sufrió un desmayo producido por la medicación que recibía desde aquella semana por ansiedad laboral, episodio que, según aseguran, se repitió en otra ocasión en días posteriores.