Defensa prepara rastreadores en el Ejército que podrán actuar en las comunidades si lo requieren
El Ministerio de Defensa, con el objetivo de controlar la transmisión del virus en las Fuerzas Armadas, ha previsto un sistema de rastreo para la detección precoz y tiene pensado capacitar a personal militar como rastreadores, que además podrán estar a disposición de las autoridades que lo requieran.
Esta medida se enmarca dentro de la Instrucción publicada en el Boletín Oficial de Defensa por la Subsecretaria de Defensa en la que se establece el Sistema de Respuesta Temprana ante el Covid-19. En este sentido, el Ministerio ha elaborado un plan en un escenario de control de la pandemia en el ámbito de Defensa.
Con este plan, se prevé dar respuesta a apoyos puntuales y excepcionales solicitados por las autoridades competentes ante situaciones de emergencia derivadas de la propagación del Covid-19, y se crea un núcleo, bajo la dirección del secretario general de Política de Defensa, con el apoyo de la Inspección General de Sanidad.
El personal designado dentro de las Fuerzas Armadas dispondrá de formación adecuada para ejercer su función. La planificación y coordinación de los cursos de rastreadores será responsabilidad de la Dirección General de Reclutamiento y Enseñanza Militar.
La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha asegurado que se están formando rastreadores dentro del Ejército para que en caso de ser necesarios, si las comunidades autónomas lo consideran oportuno, puesto que es su competencia, puedan apoyarlas en la estrategia de detección precoz, vigilancia y control en colaboración con Salud Pública de las autonomías y el Instituto de Medicina Preventiva de la Defensa.
Es decir, si cualquier comunidad entendiera que para rastreos o desinfecciones necesitaran la ayuda del Ejército por falta de medios propios, las Fuerzas Armadas «estarían ahí» porque, según apuntan desde Defensa, su misión es estar con los ciudadanos.
Las Fuerzas Armadas ha realizado una importantísima y valiosa labor en España durante los peores momentos de la pandemia de Covid-19 con la puesta en marcha de la ‘Operación Balmis’. Colaboraron en todas las comunidades autónomas con las autoridades sanitarias levantando hospitales de campaña, limpiando y desinfectando residencia de mayores y transportando cadáveres de las víctimas con el mayor de los respetos a las morgues improvisadas, entre otras acciones.
‘Operación Balmis’
Recientemente rechazaron un reconocimiento expreso a su encomiable labor porque realizarla «es nuestro deber». La labor del Ejército en la lucha contra el coronavirus ha recibido el aplauso de la población y la atención del propio Gobierno. Lo ha hecho hasta tal punto que desde el Ejecutivo se planteó una distinción o gratificación general para todas las Fuerzas Armadas por su decisivo papel humanitario en la ‘Operación Balmis’. Pero si intachable y totalmente elogiable ha sido la actitud de los militares en las múltiples tareas desempeñadas, igual fue la respuesta de los mandos: declinaron una distinción por este motivo porque «es nuestro deber» actuar como actuaron.
Las funciones del Ejército han sido notables: desde la creación de hospitales de campaña y el traslado de muertos, labores logísticas de preparación y conducción del material necesario para la protección, limpieza en espacios públicos y ayuda en las residencias de mayores hasta decisiones personales de acompañamiento de las víctimas y familiares en los peores momentos.
Todo ello, sin una sola queja pública, y pese a los desprecios recibidos, por ejemplo, de parte del Gobierno separatista del PNV y PSE en el País Vasco, y de la Generalitat catalana en manos de Quim Torra.
«Su deber»
Pero en el Ejército consideran que todo ello es, simplemente, «su deber».
Por ese motivo los mandos de las Fuerzas Armadas han preferido declinar un reconocimiento general. La encomiable postura de los principales responsables del Ejército, de hecho, es lo que ha llevado al Gobierno a optar por una política de condecoración individual como medio de reconocer la labor vital llevada a cabo en la ‘Operación Balmis’.
El Ministerio de Defensa, de ese modo, y por el momento, ha concedido 150 cruces al mérito militar a efectivos que han destacado en el desarrollo de la ‘Operación Balmis’, que durante los últimos tres meses ha sacado a los militares a la calle para luchar contra el coronavirus.
El Boletín Oficial de Defensa (BOD) ha publicado ya la resolución por la que el Ministerio ha premiado a 148 militares y dos civiles con la Cruz al Mérito Militar, Naval y Aeronáutico con Distintivo Blanco. Entre los condecorados se encuentran oficiales, suboficiales, personal de tropa y marinería y dos civiles.
La resolución explica que este reconocimiento se concede «por haber destacado especialmente en el cumplimiento de los cometidos de la ‘Operación Balmis’».