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Ryanair se salva de ‘la sangría’ del Covid en el sector aéreo en Bolsa y repunta un 10% en 2020

Ryanair gasto
El nuevo hachazo de la Justicia a Ryanair supondrá un gasto de más de medio millón para la aerolínea
Natalia Mateos
  • Natalia Mateos
  • Periodista y redactora de economía en OKDIARIO. Tras tres años escribiendo sobre turismo y sus empresas, ahora estoy descubriendo el mundo de la distribución y el retail. Antes en el Palacio de la Bolsa y Cadena Cope. De Zamora y del Zamora.

La pandemia del Covid-19 ha golpeado muy duramente al sector turístico a nivel mundial. En los últimos meses, la facturación de las compañías aéreas se ha desplomado como consecuencia del coronavirus, del mismo modo que también ha caído su cotización en los principales parqués europeos. Sin embargo, la aerolínea irlandesa de bajo coste, Ryanair, muestra una tendencia muy diferentes, y mantiene una revalorización de en torno a un 10% desde el pasado mes de enero. 

De este modo, la evolución que presenta la compañía aérea con sede en Irlanda, se sitúa a contracorriente que el resto de las aerolíneas de bandera europeas. Hay que tener en cuenta que las restricciones en la movilidad impuestas por numerosos gobiernos para tratar de contener la propagación del virus, han afectado enormemente a la demanda de pasajeros de las aerolíneas.

Si se analiza la trayectoria bursátil de otras compañías aéreas europeas, se puede ver como la aerolínea anglo-española IAG acumula pérdidas en el parqué español desde el pasado mes de enero que alcanzan el 40%. A pesar de la cotizaba ha logrado mejorar su camino en el Ibex 35, los meses de confinamiento supusieron un importante golpe para la empresa española que llegó a desplomarse en Bolsa hasta un 70%.

Junto a ella, el resto de grandes aerolíneas europeas también presentan balances negativos en el terreno bursátil tras el impacto del Covid-19. Este es el caso de la alemana Lufthansa, que ha caído desde el pasado mes de enero un 40%, Air France-KLM, que ha perdido en torno a un 50%, Norwegian que llegó a hundirse alrededor de un 95% tras declararse en concurso de acreedores y Easyjet, que ha bajado un 40%.

Así, la compañía de bajo coste Ryanair, que se encuentra frecuentemente en el centro de la polémica como consecuencia de sus controvertidas actuaciones en relación con sus trabajadores, ha logrado salvarse de la ‘sangría’ que ha supuesto el virus para la cotización de las compañías del sector aéreo.

Recuperación de la confianza

En las últimas semanas, un ligero incremento de la demanda y las reservas como consecuencia de la vuelta a casa por Navidad, junto con el inicio de la campaña de vacunación, que comenzó este domingo en Europa, han logrado despertar la confianza entre los inversores. Así el precio de las acciones de las compañías aéreas ha recuperado parte del valor perdido a lo largo de todo el año, pese a que la nueva cepa detectada en Reino Unido supone una amenaza para esta recuperación.

De este modo, a pesar de la ligera recuperación que se ha vivido en los últimos días, el sector turístico no espera recuperar los niveles registrados con anterioridad a la pandemia hasta el próximo 2022. De hecho, la Comisión Europea (CE) pidió este pasado miércoles flexibilizar las normas de ‘slots’ que se aplican en los aeropuertos europeos para evitar que las aerolíneas pierdan sus franjas horarias habituales si durante el verano de 2021 se ven obligadas a reducir drásticamente sus rutas, para evitar que estas exigencias se traduzcan en más vuelos «fantasma» por las restricciones y caída de la demanda derivada de la pandemia de coronavirus.

Por ello, Bruselas planteó que se reduzca del 80% al 40% la cantidad de frecuencias que las compañías deben cumplir en un aeropuerto para no perder sus ‘slots’ en temporadas consecutivas, cuando se hayan superado las limitaciones por la Covid. Y es que la normativa europea comunitaria obliga a las aerolíneas a operar al menos el 80% de sus franjas horarias asignadas para la temporada y el incumplimiento de este requisito supone perder el derecho de los ‘slots’ en temporadas siguientes.

Esta situación hizo que en los primeros momentos de la pandemia las compañías mantuvieran muchos vuelos considerados «fantasmas» –que iban vacíos por las medidas de confinamiento y cierre de fronteras– por miedo a perder sus franjas futuras. Bruselas enmendó entonces el reglamento de manera temporal para dar mayor flexibilidad a las aerolíneas y ahora ofrece otra revisión para la temporada de verano de 2021 porque estima que el tráfico aéreo seguirá estando al 50% con respecto a la capacidad de periodos previos a la pandemia.

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