Puñetazo en la mesa del BCE: Lagarde pide a los gobiernos bajar los impuestos a la electricidad
Christine Lagarde, presidenta del BCE, alerta sobre los efectos en la industria europea de tener impuestos a la electricidad y al gas superiores a EEUU


Puñetazo en la mesa de Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo (BCE). La responsable del BCE ha urgido a los gobiernos europeos a reducir los impuestos a la electricidad para no dañar la industria europea, que se compite con Estados Unidos donde los impuestos son menores. «En Europa, la electricidad aún soporta impuestos más altos que el gas, lo que desincentiva la electrificación. Si bien esta brecha se reducirá a medida que la tarificación del carbono se extienda a los combustibles para calefacción, los gobiernos ya pueden actuar reduciendo los impuestos a la electricidad», ha urgido Lagarde.
«Los precios de la electricidad en la UE siguen siendo aproximadamente dos veces y media más altos que en Estados Unidos, y los precios del gas son casi cuatro veces más altos. Esta brecha está determinando cómo las empresas invierten e innovan, e incluso dónde deciden ubicarse», ha dicho este martes.
«Las investigaciones del BCE muestran que las empresas europeas reducen significativamente sus gastos de capital y de I+D en respuesta a los shocks energéticos, a diferencia de sus contrapartes estadounidenses. También existe una creciente preocupación de que el aumento de los precios de la energía pueda incluso estar contribuyendo a la desindustrialización, mientras las empresas europeas luchan contra la competencia extranjera», ha advertido Lagarde.
La petición de Lagarde se produce en medio del debate en España sobre el cierre de las nucleares, precisamente por la decisión del Gobierno de Pedro Sánchez de no aceptar una ampliación de la vida útil de las nucleares si implica una reducción de los impuestos que pagan estas centrales.
Las compañías quieren extender la vida útil de las nucleares, Almaraz la primera, cuyo cierre está previsto para 2027, pero solicitan al mismo tiempo una rebaja en la fiscalidad para hacerlas rentables. El Gobierno se niega con el argumento de que no quiere tenga impacto en la factura de la luz.
Sin embargo, el Gobierno ha retomado desde enero el impuesto a la generación eléctrica y ha eliminado las rebajas del IVA de electricidad y gas, que han vuelto al 21%.
Lagarde también ha pedido una mayor conexión internacional en el sistema eléctrico, algo que ha pedido España en numerosas ocasiones y Francia se ha negado.
«Una integración más profunda del mercado energético –por ejemplo, a través de más interconectores transfronterizos– permitiría a los países compartir el excedente de electricidad, suavizar las fluctuaciones de fuentes intermitentes y utilizar la generación y la capacidad de la red de manera más eficiente. La investigación subraya los beneficios. Se ha comprobado que una integración transfronteriza más profunda reduce los costos generales del sistema en alrededor de un 9% (equivalente a 26.000 millones de euros anuales) y reduce los precios de la electricidad más que los enfoques nacionales aislados», ha señalado.