La plantilla de Volkswagen Navarra teme que Sánchez lleve producción a Cataluña para agradar a sus socios

La plantilla de Volkswagen Navarra teme que el Gobierno de Pedro Sánchez deslocalice producción de Landaben para trasladarla a la planta que tiene el grupo alemán -Seat Martorell- en Cataluña con el objetivo de agradar a sus socios independentistas y mantener su sillón en el Palacio de la Moncloa. Un temor que se debe al incremento del coste de ensamblaje en la factoría navarra de 300 euros por unidad gracias a la externalización del montaje de las baterías a Hyundai Mobis -tal y como avanzó este diario-. Un gasto que no tendrán en Barcelona, ya que las instalaciones sí que contarán con su propia fábrica de celdas de baterías, financiada con fondos europeos.

Así lo han explicado fuentes cercanas a la negociación en conversaciones con este diario que han explicado que «la plantilla teme que las últimas decisiones -en referencia a la negativa de Volkswagen a financiar una planta de celdas de baterías para Landaben- que ha tomado la multinacional alemana, que priorizan la planta de Cataluña frente a la de Navarra, terminen afectando al número de ensamblajes pactados con la llegada de las nuevas adjudicaciones en el año 2027».

Tal y como avanzó este diario, Mobis, una división de la Hyundai, será la encargada de suministrar baterías a la factoría que Volkswagen tiene en Navarra y que se integrará en la plataforma de vehículos eléctricos de la próxima generación de la marca alemana.

Sánchez allana el camino a Cataluña

Unas decisiones que las citadas fuentes vinculan a las facilidades que está dando Moncloa a la compañía alemana para invertir en Cataluña, mientras el gobierno de la socialista María Chivite evita pronunciarse y mover ficha directamente con Wolfsburgo -ciudad en la que está la sede de Volkswagen-. «Las Administraciones han jugado un papel muy desfavorable para los intereses de nuestra industria», critican las citadas fuentes.

«No entendemos por qué Volkswagen ha optado por dar a Seat Martorell su propia planta de celdas de baterías, que se financiará con fondos europeos tras presentarse como uno de los proyectos candidatos de la segunda convocatoria del Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económico (PERTE) del vehículo eléctrico, y no a Navarra, sobre todo porque en caso de que las adjudicaciones a pilas no convenzan en el mercado el gran perjudicado será Navarra al incrementarse el coste medio de producción hasta los 300 euros», critican.

Más coches y más pronto en Martorell

No es la primera vez que Volkswagen beneficia a Cataluña frente a Navarra para contentar a sus socios independentistas. Con el reparto de las nuevas adjudicaciones derivadas del nuevo plan industrial, Volkswagen otorgó más producción a Seat Martorell que a Landaben con modelos de mayor importancia comercial y cuyo ensamblaje tendrá lugar antes para evitar el impacto de la caducidad industrial en el empleo.

En concreto, Volkswagen prevé producir tres millones de vehículos eléctricos pequeños hasta 2030 en sus fábricas de España. Además de los tres compactos eléctricos de Martorell con una inversión de 3.000 millones de euros a partir de 2025, el grupo planea hacer dos SUV eléctricos en Landaben con la mitad de presupuesto y dos años más tarde -2027-.