Las petroleras se enteran por la prensa de que van a pagar parte de la subvención al transporte
Las petroleras se han enterado por la prensa de que el Gobierno ha decidido que sufraguen parte de los 500 millones con que bonificará el gasóleo de los camioneros. Una decisión que confirmó pasadas las 21:00 horas del lunes la vicepresidente Nadia Calviño y de la que no habían sido informados y que se contradice con las declaraciones de la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, que había dicho por la tarde que el gasto correría a cargo de los Presupuestos Generales del Estado.
Ni las empresas ni las asociaciones sectoriales tenían información de que tendrían que pagar parte de la fiesta -una «contribución especial», en palabras de Calviño-. Esta medida imita a la adoptada hace algunas semanas por el Gobierno francés (curiosamente, Pedro Sánchez se había reunido el lunes por la tarde con Emmanuel Macron).
Tampoco saben qué porcentaje les va a tocar ni exactamente quién tendrá que pagar, ya que el Ejecutivo habla de «distribuidoras o comercializadoras» sin concretar exactamente qué empresas entran en esa definición. Lo cual ha generado un enorme malestar en el sector, como es lógico.
De hecho, algo que critican especialmente es que el Gobierno se niegue a bajar impuestos, que sería la medida más sencilla y eficaz, como han solicitado no sólo los transportistas, sino todos los colectivos afectados por la subida de los combustibles.
No obstante, la oferta de los 500 millones ha sido totalmente insuficiente. Como adelantó OKDIARIO, la plataforma de camioneros autónomos que inició el paro el lunes de la semana pasada rechazó la propuesta y decidió mantener las movilizaciones. Y lo que es más grave, varias de las grandes patronales se han sumado al paro. Es decir, el Gobierno comenzó la negociación con un porcentaje minoritario de los transportistas en huelga y acabó con la mayoría del sector paralizado. Todo un éxito.