Los pensionistas no van a recibir la paga extra de enero y esta es la razón

El panorama de las pensiones ha experimentado cambios muy importantes en este nuevo año que van a afectar a más de nueve millones de personas en nuestro país. Entre las novedades, destaca la decisión del Ministerio de Seguridad Social de eliminar la conocida ‘paguilla’ de enero que iba destinada a compensar a los jubilados por el aumento del coste de la vida.

Eliminación de la paguilla de enero

Hasta el año 2022, los pensionistas solían recibir esta ‘paguilla’ para equilibrar la diferencia entre el incremento del 0,9% en sus prestaciones y el 2,5% que representaba el IPC del ejercicio anterior. Esto supuso un desembolso de aproximadamente 2.000 millones de euros por parte de Hacienda para compensar la desviación de la inflación en el año 2021.

La última reforma del sistema de pensiones ha eliminado este ajuste, volviendo a vincular la actualización de las prestaciones al IPC, tras un periodo en el que dejaron de subir en función del coste de la vida. El aumento ahora se calcula en función de la inflación media, un sistema que ha suscitado críticas por posiblemente quedarse en algunos momentos por debajo de la realidad, y que va a requerir un cálculo anual basado en los doce meses anteriores.

En este contexto, el Ministerio de Seguridad Social ha decidido poner fin a la ‘paguilla’. Esto impacta de manera directa en 9 millones de jubilados y en un total de 10 millones de pensiones, ya que aproximadamente el 10% de los jubilados reciben dos pensiones. A pesar de que se mantendrán las 14 pagas anuales, perderán esta cantidad adicional como compensación por el ajuste del IPC.

La ‘paguilla’ era un ingreso extra que los pensionistas solían recibir al inicio del año para contrarrestar la pérdida de poder adquisitivo. Según fuentes gubernamentales, esta supresión también se justifica en el aumento que experimentarán la mayoría de las pensiones en 2024.

Actualización de las pensiones

Las pensiones se han actualizado este mes de enero según el valor medio de los incrementos porcentuales interanuales del IPC entre diciembre y noviembre. El Gobierno ha aprobado un aumento del 3,8% para el nuevo año, aplicable tanto a las pensiones contributivas como a las no contributivas. Esto se traduce en un aumento medio de alrededor de 50 euros al mes, según estimaciones de la Seguridad Social.

La pensión media del sistema, que abarca jubilación, incapacidad permanente, viudedad, orfandad y en favor de familiares, se eleva aproximadamente en 46 euros al mes, superando los 1.240 euros, marcando así un récord.

Las jubilaciones individuales experimentarán un aumento mayor en 2024, con un alza de alrededor de 53 euros al mes, casi alcanzando los 1.430 euros mensuales. La pensión máxima del sistema se aproximará a los 3.200 euros, después de superar por primera vez los 3.000 euros el año anterior.

Además, las pensiones mínimas y no contributivas tendrán un incremento superior al 4% de las pensiones generales, gracias a una reforma que estableció un aumento mayor para este colectivo más vulnerable. Las no contributivas pasarán de los actuales 484 euros al mes a 521 euros en 2024, según estimaciones del Ministerio.

En cuanto a las pensiones mínimas de viudedad, se prevé un aumento entre 40 y 126 euros al mes este año, alcanzando los 823 euros para mayores de 65 años sin cargas y 1.031 euros para viudas con cargas familiares.

Finalmente, más de 550.000 jubilados, en su mayoría mujeres, que reciben un complemento por brecha de género, verán un incremento adicional del 10% a la inflación en enero, lo que podría llevar este plus de 30,4 euros por hijo a aproximadamente 35 euros. La ‘paguilla’ solía superar los 200 euros, siendo una ayuda significativa para afrontar los gastos de inicio de año.

Las nuevas pensiones generan debate

El cambio en la forma en que se ajustan las pensiones ha generado debate y preocupación entre algunos colectivos de pensionistas. La vinculación al IPC medio anual ha sido objeto de críticas debido a la posibilidad de que, en ciertos momentos, no refleje totalmente el incremento real del coste de vida. Este sistema requiere un análisis anual y una evaluación basada en los doce meses anteriores, lo que ha suscitado incertidumbre sobre su precisión y su capacidad para mantener el poder adquisitivo de los pensionistas.

Si bien las pensiones han experimentado un aumento en este nuevo año, la eliminación de la ‘paguilla’ ha sido recibida con preocupación por parte de algunos beneficiarios. Este complemento adicional, que tradicionalmente ayudaba a compensar el alza del coste de vida en los primeros meses del año, ha dejado de existir, generando inquietud sobre cómo afrontarán los pensionistas estos gastos adicionales.

A pesar de los aumentos registrados en las pensiones, la supresión de esta compensación puntual ha llevado a algunos jubilados a expresar su preocupación por la capacidad de sus ingresos para cubrir los costos emergentes. La incertidumbre sobre cómo se ajustarán a este cambio sin el apoyo adicional que ofrecía la ‘paguilla’ ha llevado a discusiones sobre la efectividad y el impacto real de la nueva fórmula de ajuste de las pensiones en el bienestar económico de los beneficiarios.