El parón alemán a los fondos europeos deja en el aire 27.000 millones de los presupuestos de Sánchez
Grave contratiempo para el Gobierno de Pedro Sánchez y su gran baza electoral: los fondos europeos para incentivar la recuperación económica. El Tribunal Constitucional alemán ha paralizado la aprobación de los mismos, lo cual va a retrasar, como mínimo, su llegada a España. Eso, si no se recorta la cuantía. Pero los Presupuestos Generales del Estado de 2021 ya incluyen 27.000 millones de ingresos a cuenta de los 80.000 que en teoría vamos a recibir. Pero si finalmente no llegan este año, España tendrá que apuntárselos como déficit y financiarlos con nuevas emisiones de deuda pública.
Todos los parlamentos de los Estados miembros deben aprobar este plan de ayudas porque la UE tiene que endeudarse por primera vez en su historia para financiarlas, algo que no está contemplado en los Tratados. Y la Comisión no puede salir a emitir al mercado hasta tener ese visto bueno. En Alemania, las dos cámaras de su parlamento ya habían aprobado el plan Next Generation, pero el Constitucional ha paralizado su firma por parte del presidente de la República hasta que resuelva un recurso presentado por Alternativa por Alemania (AfD).
Es difícil predecir qué consecuencias puede tener esta decisión y si puede llegar a bloquear por completo el plan de rescate o, al menos, a reducir su importe. Pero lo que seguro va a provocar es un retraso de su entrega, y es probable que no lleguen hasta 2022, pese a que la Comisión Europea debe aprobar los planes nacionales el 30 de junio.
Si eso llega a ocurrir, el Gobierno español se enfrentará a un problema muy serio, ya que presupuestó 27.000 millones de ingresos de los fondos europeos en 2021, a pesar de no tener la certeza de que iba a recibirlos este año. Tendría que apuntarse esa cantidad como déficit público, lo que destrozaría todas las previsiones, y financiarla con más emisiones de deuda pública cuando esta ya alcanza el 120% del PIB (al incluir la deuda de Sareb).
Sánchez siempre puede pedir a Bruselas una dispensa alegando que se trata de algo excepcional y que le permita que los 27.000 millones no computen como déficit porque al final los va a recibir, aunque sea con retraso. Pero no está nada claro si la Comisión se lo permitiría. Eso, si al final no se bloquea totalmente el programa, algo que los expertos no consideran probable dada la situación de las economías de muchos países europeos -no solo España-, pero que no es descartable después de este pronunciamiento del Constitucional germano. Porque, además, otros países de los llamados «frugales» pueden seguir su ejemplo y bloquear también los fondos.
El anuncio electoral de Sánchez queda en entredicho
El problema para Sánchez no es solo económico, sino también político. Como informa este viernes OKDIARIO, el presidente del Gobierno tenía previsto anunciar el reparto de los fondos en plena campaña electoral de la Comunidad de Madrid para intentar capitalizarlo en las urnas. Ahora, con la enorme incertidumbre que se cierne sobre este dinero, sería muy arriesgado mantener ese plan porque puede encontrarse con que al final no disponga de ese dinero o que la cantidad sea muy inferior a la anunciada.
El pomposamente llamado Plan de Recuperación, transformación y resiliencia se basa en el dinero europeo y se queda en nada sin él. Hay que recordar que este dinero no se entrega al Gobierno para que haga con él lo que quiera, sino que tiene que presentar líneas y proyectos concretos en los que se va a gastar en dinero. Por último, el Ejecutivo ha renunciado a 68.000 millones en préstamos a cambio de elevar hasta 80.000 millones las ayudas directas que ahora están en el aire.