La industria cárnica carga contra los filetes sintéticos: «Son 8 veces más caros y malos para la salud»
"Nos estamos jugando la existencia de nuestra civilización", advierte Aloisio
"El cultivo de carne sintética se hace a la velocidad que tiene un tumor", explica
"La carne sintética, ¿es para cubrir las necesidades de alimentación o son los caprichos de una clase elitista?"
El precio del diésel sube de nuevo pero el de la gasolina se mantiene: esto es lo que cuesta repostar
¡Comienza a ahorrar para Navidad! Aldi hunde el precio de la pata de pulpo a niveles nunca vistos
Giuseppe Aloisio, director general de la Asociación Nacional de Industrias de la Carne de España (Anice), que representa a la industria cárnica del país, afirma en una entrevista a OKDIARIO que la carne sintética tiene «al menos 53 peligros» para la salud y que es hasta 8 veces más cara que la convencional. El representante del sector asegura que hay una lucha económica por la proteína. Por ello, existen muchos intereses por denostar a la carne de origen animal y plantear alternativas como estas, pese a que todavía no están lo suficientemente testadas y los análisis indican que pueden tener bastantes riesgos.
«Es un proceso de innovación tecnológica llamado a cubrir las necesidades mundiales de ingesta de proteína», explica Aloisio. «Según la FAO, el consumo mundial de proteína va a subir un 15%, por lo que habrá que cubrir con oferta esa demanda», desvela.
Sin embargo, «la proteína fabricada en laboratorio» no será una buena alternativa, pues tendrá el «aspecto de la carne», pero, para incrementar un 1% la proteína mundial, «se necesitan hasta 440 millones de litros de caldo de cultivo con todos esos nutrientes que el biorreactor multiplicará con la velocidad que tiene un tumor».»Es una velocidad de crucero tumoral para producir esa carne», sentencia el representante.
«El cultivo de carne sintética se hace a la velocidad que tiene un tumor», explica el representante de la industria cárnica.
Sin embargo, la industria cárnica no está en contra de la carne sintética o de laboratorio, sino que considera que necesita tener una regulación acorde: «Nadie va en contra del desarrollo y nosotros no batallamos contra nadie. Nosotros lo que queremos es que todo lo que se vaya desarrollando, que vaya apareciendo como una alternativa para los consumidores, tenga juego limpio y reglas claras».
Reivindicaciones de la industria
«Cualquier producto que entre en la Unión Europea tiene que pasar por el test de la EFSA (Agencia Europea de Seguridad Alimentaria). La FAO ha advertido de al menos 53 peligros que pueden derivarse de productos relacionados con cultivos celulares. Uno de los grandes argumentos, tanto de los productos veganos como de los productos de proteínas alternativas, es que son más saludables y más sostenibles, y eso es rotundamente falso», denuncia Aloisio.
«Un ultraprocesado vegetal dudo mucho que sea más sostenible y más saludable. Los experimentos que se están haciendo en la llamada carne de laboratorio tienen un consumo de entre 3 y 14 veces más de combustible fósil que una carne producida con un sistema tradicional y hasta 25 veces más de emisiones de gases de efecto invernadero», revela el profesional. «¿De verdad nos vamos creyendo la patraña de que son más sostenibles, de que son más saludables? Yo creo que no», clama.
Problemas de la carne sintética
«La carne sintética, ¿es para cubrir las necesidades de alimentación de proteína en el mundo o son los caprichos de una clase elitista?», se pregunta el profesional.
«Uno de los estudios que he estado leyendo recientemente indica que la carne de ternera llegaría al lineal a 11 dólares y la carne mal llamada carne de laboratorio estaría en 88 dólares. ¿Esto es para cubrir las necesidades de alimentación de proteína en el mundo o son los caprichos de una clase elitista?»
«Queremos que esto esté testado a nivel de seguridad alimentaria y que después esté bien reglamentado para que no venga otro producto de imitación y que se llame carne, que salga de una impresora 3D, de un biorreactor con un funcionamiento de aceleración de células parecida a la de un tumor», reivindica.
«Al final estamos tan centrados en culpar al hombre en los problemas relacionados con el cambio climático que queremos intervenir en la cadena de alimentación que ha permitido la evolución del hombre», afirma Aloisio.
«Nos estamos jugando la existencia de nuestra civilización tal como la hemos venido conociendo», advierte Aloisio.
«Si nosotros renunciáramos a la ganadería, hay una cantidad de 3.000 millones de toneladas cada año que, en vez de en vez de ser alimento para los animales a nivel mundial, serían un residuo de verdad. ¿Nos seguimos creyendo que podemos prescindir de la ganadería? Y ya no estoy hablando de los aspectos sociales, sino de los aspectos relacionados con la existencia de nuestra civilización tal como la hemos venido conociendo», advierte.