Las grandes constructoras calculan que con el parón de las obras perderán 345 millones cada día
En el plano laboral, afectará a los 1,77 millones de trabajadores que emplea el sector, el segundo sector productivo en intensidad de mano de obra del país
Las grandes constructoras estiman una pérdida de 345 millones de euros por cada día de paralización de las obras de construcción decretada por el Gobierno de Pedro Sánchez para suspender las actividades no consideradas esenciales en el marco de la actual crisis sanitaria por el coronavirus.
Así lo asegura la patronal del sector Seopan, quien extrae este cálculo del hecho de la construcción representa el 10% de la economía española y genera una producción anual de 124.000 millones de euros.
En la materia laboral, el parón afectará a los 1,77 millones de trabajadores que emplea el sector, el segundo sector productivo en intensidad de mano de obra del país, solo superado por la agricultura.
A pesar de ello, Seopan, al contrario que otras asociaciones patronales, aseguran no plantear «discusión alguna» a la decisión del Gobierno de parar las actividades económicas no esenciales en el marco de la lucha contra el coronavirus.
Escaso margen de tiempo
No obstante, la patronal constructora realiza algunas puntualizaciones. La primera de ellas pasa por considerar escaso el margen de tiempo de un día, de este lunes, que el Gobierno ha dado para proceder a parar las actividades.
En el ámbito de la construcción, Seopan indica que es «insuficiente» para implementar «cuantas medidas de seguridad son necesarias antes del inicio del periodo de inactividad», tanto para las empresas contratistas como para las direcciones facultativas de los clientes, públicos y privados, «que necesariamente deberán supervisar y dar instrucciones a este fin», según detalla la organización en un comunicado.
Medidas para garantizar la seguridad de las obras
En segundo término, las constructoras estiman necesario permitir ciertos «retenes» de personal y una serie de medidas para garantizar la integridad de las obras durante el periodo de inactividad.
Por ello, la patronal constructora solicita al Gobierno que traslade instrucciones detalladas para poder realizar una suspensión ordenada de la actividad, y además adopte «medidas urgentes» de apoyo financiero al sector.