La hostelería al completo se encuentra en sus horas más bajas. La crisis del covid-19 ha hecho mella en todo tipo de locales, entre ellos los negocios de ocio como las boleras. Cidalia es la propietaria de uno de estos establecimientos en Fuenlabrada. El pasado 13 de marzo, al igual que el resto de la hostelería, tuvo que echar el cierre como consecuencia del estado de alarma -que declaró el presidente del Gobierno Pedro Sánchez para frenar el avance de la crisis del coronavirus-.
La bolera sólo registra un 10% de la actividad en comparación con hace un año. Además, la edad de la propietaria ha hecho que muchas ayudas le fuesen denegadas, mientras los costes para cerrar su negocio ascienden hasta los 20.000 euros. Ante esta situación, Cidalia sólo espera poder seguir trabajando y superar esta situación llena de incertidumbre.