Federer ya espera a Nadal en la final de Australia
Roger Federer está de vuelta. El suizo ha derrotado a su compatriota Wawrinka en las semifinales del Abierto de Australia en cinco sets (7-5, 6-3, 1-6, 4-6 y 6-3) y ha sellado el pase a la final, donde se enfrentará al ganador de la otra semifinal entre Nadal y Dimitrov. Tras seis meses sin competir, el helvético ha vuelto por la puerta grande, recordando al Federer campeón de 14 grandes.
Tenía claro que debía dominar con su juego y llevar la iniciativa para doblegar al número cuatro del mundo. Así lo hizo desde el primer momento, planteando un juego muy sólido con sus subidas a la red. Wawrinka no encontraba la manera de doblegarle y Roger se apuntó el primer set por 7-5. Pese al domino del ex número uno del mundo, toda una leyenda viva del tenis, Stan se mantenía cerca.
Pero Federer demostró que no ha venido a Australia de paseo. Ha estado seis meses entrenando, sin participar en los torneos ni en los Juegos Olímpicos de Río 2016, preparándose para la cita de Melbourne donde ha levantado el trofeo de campeón en cuatro ocasiones. Él seguía a lo suyo, sólido con su juego, destrozando a su compatriota camino de su sexta final en tierras australianas. Wawrinka desaprovechó cinco bolas de rotura y Federer no tuvo piedad y se apuntó también la segunda manga por 6-3.
Todo hacía presagiar que el gran Roger Federer iba a disputar una nueva final de Grand Slam, tras derrotar a su compatriota otra vez. Sin embargo, el número cuatro del ranking ATP resurgió de sus cenizas cuando todos lo daban por muerto y le endosó un contundente 1-6 en el tercer set para mantenerse vivo en el partido. Stan todavía no había dicho su última palabra, no estaba dispuesto a rendirse tan fácilmente y luchó hasta el final.
Sólo Nadal puede frenarle
Forzó el quinto set después de adjudicarse el cuarto por 4-6. Otra vez igualados. Wawrinka remó a contracorriente para remontar el encuentro pero se quedó en la orilla. Pese a su esfuerzo por darle la vuelta al choque y pelear por ganar su cuarto Grand Slam, nada pudo hacer en la última manga ante un Federer imperial que sacó a pasear su mejor juego para derribar –una vez más– a su compatriota, que terminó desolado.
Será su vigésimo quinta final de un grande. Después de quedarse a las puertas la pasada campaña, tras perder ante Djokovic en semifinales, Roger ha hecho un regreso triunfal, confirmando su candidatura al título, donde sólo su némesis, Rafa Nadal puede amargarle la fiesta. Es el único que ha conseguido derrotar a Federer en una final del Abierto de Australia, en 2009, y confía en repetir hazaña.