El ‘Guti Team’ tira de épica para cantar el alirón
El Juvenil A del Real Madrid ya tiene su segundo objetivo de la temporada. Quizás el más importante, ya que es el que da pie a que ahora dos nuevas metas aparezcan en el horizonte de un equipo entrenado por Guti que lo quiere todo. Tras meterse en la Final Four de la Youth League llegó el campeonato de División de Honor. Con más sufrimiento de lo esperado, con un cabezazo de un central en el descuento, no podía ser de otra manera, pero premio al fin y al cabo. Así es el Madrid.
Los blancos recibían entre semana al Getafe para recuperar un partido aplazado dos semanas atrás. Las cuentas eran claras: ganar significaba ser campeón. Todo lo que no fuera eso era complicarse la vida. Y cerca estuvieron de hacerlo. El Madrid comenzó el duelo atascado. El ‘Guti Team’ no era capaz de encontrar su fútbol ante una escuadra azulona bien planta que también tenía sus retos. Asaltar Valdebebas les acercaba a la Copa del Rey. Los madridistas no generaban peligro, mientras que el Getafe sin hacer mucho se encontró con el premio del gol. Una diana que pesaba como una losa en el Juvenil A. Cabizbajos. Sin encontrar el rumbo. Así se marcharon al vestuario.
La segunda mitad comenzaba con aires renovados. Como en Mónaco, Guti cambió el partido. Dio entrada a Toni Segura y ya nada sería igual. El Getafe salió muy metido atrás y el Madrid comenzó a dominar. Ya tocaban, hilaban jugadas, cada vez el Juvenil A se parecía más al equipo que ha maravillado durante toda la temporada. Y en estas llegó el empate gracias a un gol de listo de Dani Gómez. Franchu disparaba desde la frontal y el de Alcorcón estaba muy rápido para hacerse con el rechazo. 1-1, pero faltaba otro.
El tiempo pasaba y el Madrid mandaba. Aunque el gol que daba el título no aparecía. Fran, descomunal por la banda izquierda, era el hombre que más peligro llevaba al arco visitante. Pero ninguna terminaba besando las redes, hasta que llegó la épica. En el descuento, tras reclamar un penalti, el filial tenía un córner como última bala. Óscar sacaba, Fran la ponía y Soti saltaba más que todos para hacer el 2-1. La locura se instalaba en las gradas del campo 4 de la Ciudad Real Madrid.
Guti y sus chicos celebraron el título sobre el césped, antes de empezar a pensar en retos mayores. El domingo ante el Alcalá será una oportunidad para los menos habituales. Luego llegará la Final Four de Nyon, la Copa de Campeones de Galicia y la Copa del Rey. Los mejor está por llegar.