Claves de Rafa Nadal en el Open de Australia
Rafa Nadal llega al Open de Australia de Melbourne, donde aspira a conquistar el torneo por segunda vez en su carrera y alcanzar los 21 Grand Slams
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Rafa Nadal ya conoce su camino en el Open de Australia, donde debutará a comienzos de la próxima semana y donde busca su segundo título en suelo australiano. Analizamos las claves de la participación del número dos del mundo en el primer Grand Slam del año.
Llega la primera gran cita de la temporada, la disputa del Open de Australia -del 8 al 21 de febrero-, uno de los grandes objetivos de Rafa Nadal en este 2021. El español, número dos del mundo, debutará en el primer Grand Slam ante el serbio Laslo Djere, número 56 del ranking ATP y ante el que nunca antes se ha medido. Ha tenido un sorteo benévolo ya que evita a pesos pesados como Novak Djokovic o Dominic Thiem hasta la final, aunque sí comparte lado del cuadro con Daniil Medvedev, con quien se podría encontrar en unas hipotéticas semifinales.
Las posibilidades de Rafa Nadal en el Open de Australia vendrán marcadas en parte por su estado físico, ya que el mallorquín se encuentra renqueante de la espalda, hasta el punto de que se ha perdido la disputa de la ATP Cup. Ello incluso ha sembrado la duda de su participación en el torneo, pero el hecho de que continúe entrenando en la pista invita a ser optimista.
El Open de Australia es el Grand Slam que menos veces ha conquistado Rafa Nadal a lo largo de su carrera, sólo lo conquistó en una ocasión tras aquella recordada final ante Roger Federer en 2009, aunque ha disputado otras cuatro finales en el torneo ‘aussie’. De hecho, el balear llega en la mayoría de las ocasiones que ha participado a la última semana de competición a excepción del año 2016, que se vio sorprendido por Fernando Verdasco en su debut y en sus dos primeras presencias en Melbourne hace más de 15 años.
Falta de rodaje, ¿un problema?
El inicio de la temporada está siendo bastante atípico para todos los tenistas. Tras algo más de dos meses sin competir, los jugadores han tenido que pasar dos semanas de cuarentena en Australia antes de iniciar oficialmente la temporada y de buenas a primeras han de disputar un torneo al mejor de cinco sets.
El hecho de que Nadal aún no haya debutado oficialmente en la temporada -ganó en un partido de exhibición a Dominic Thiem a finales de enero- le ha impedido ir cogiendo sensaciones y probarse en la pista de Melbourne, mientras que muchos de sus rivales ya han tenido la ocasión de disputar partidos importantes como por ejemplo Djokovic, con victoria ante Zverev en la ATP Cup o Daniil Medvedev, venciendo a Diego Schwartzman en el mismo torneo.
Sin embargo, meses atrás Nadal se vio ante una situación parecida antes de la disputa de Roland Garros. El balear, al contrario que la mayoría de los jugadores del circuito, optó por no jugar en Estados Unidos e ir directamente a la gira de arcilla tras varios meses de parón. A pesar de su inesperada derrota en Roma y la multitud de cambios en París, Nadal demostró que puede ofrecer el máximo y terminó conquistando Roland Garros en una final impecable ante Novak Djokovic.
Adaptación a la pista rápida
En su búsqueda constante de mejorar, Rafa Nadal ha evolucionado mucho su juego en los últimos años, con una notable mejora de su saque y jugando más agresivo. A pesar de su indudable hegemonía en arcilla, el español resulta muy competitivo en pista rápida como demuestran sus 4 títulos en el US Open más el conquistado en Melbourne. En total, suma 22 títulos sobre este tipo de superficie y se sitúa en el octavo puesto entre los tenistas con más títulos en pista rápida de la historia.
Además, en Melbourne, Nadal tendrá una motivación especial, pues tendrá la primera oportunidad de romper el empate con Roger Federer en número de Grand Slams conquistados y ser el único del Big-3 que logre conquistar cada uno de los cuatro Grandes al menos en dos ocasiones.