La solución que esperábamos: científicos descubren como cultivar madera

Los científicos han descubierto lo imposible, saben cómo cultivar madera en un laboratorio. El ser humano está pasando a ser un elemento parte de la naturaleza, a ser capaz de crearla por sí solo. Lo hemos visto con una carne artificial que puede acabar con el problema de los millones de animales que se sacrifican para alimentar a la población mundial. Al igual que estos recursos desaparecen, también lo hacen unos árboles que parece que tienen un final contado. La deforestación es un problema que quedaría solucionado con este importante descubrimiento.

Ser capaces de cultivar la madera, sin necesidad de usar esos árboles que tienen una finalidad y un uso muy distinto. Puede acabar siendo el elemento que puede acabar generando una solución a un problema que puede ser mucho mayor al esperado. Habrá llegado el momento de poner sobre la mesa ciertos elementos que serán los que nos afectarán de lleno en un futuro. El cambio climático amenaza a todo el planeta y también a una producción que puede acabar siendo un problema. Este hallazgo científico abre la puerta a la esperanza y nos lanza directamente a por una serie de elementos que son fundamentales.

Esperábamos esta solución

La ciencia se pone a buscar una solución para que el futuro de la humanidad sea más optimista. Especialmente cuando estamos ante una serie de cambios y de momentos para los que debemos estar preparados. Sin duda alguna, tenemos que estar listos para afianzar determinados retos que son los que marcarán una diferencia importante.

Habrá llegado el momento de poner en práctica algunos retos que serán los que nos acompañarán en este camino. Queremos empezar a pensar en un futuro mejor, lejos de cualquier elemento que puede ser perjudicial. La madera es un ingrediente que acabará siendo el que nos acompañe en estos días.

Por lo que, al final, tendremos por delante algunos nuevos retos que son esenciales. Ha llegado la solución a una serie de problemas que acabarán marcando un antes y un después. Sin duda alguna, tenemos por delante una serie de detalles que quizás hasta ahora no habíamos imaginado.

Es el momento de empezar a crear algunos elementos que son los que nos afectarán de lleno y pueden acabar siendo claves. La madera es uno de los recursos limitados que hasta ahora no tenía sustituto posible. Pero hoy en día, todo es posible con unos científicos que no paran de innovar.

Los científicos saben cómo cultivar madera

La madera puede ser un elemento capaz de cultivarse y eso quiere decir que tendremos que empezar a pensar en un futuro en el que se podrá utilizar este elemento que puede surgir directamente de un laboratorio. Este elemento acabará siendo el que nos acompañe en este futuro que tenemos por delante.

Según el medio Econews: «Para crear el material similar a la madera con este método, primero se toman las hojas de una planta llamada zinnia común y se les quitan las células. Luego se combinan con un gel muy dúctil que está enriquecido con nutrientes, minerales y hormonas que refinan la mezcla para hacerla más pura. Esta combinación hace que las células vegetales se reproduzcan en otras células, que serán manipuladas en condiciones de laboratorio. Se trata de un proceso similar al del cuerpo humano, que posee hormonas que determinan el desarrollo de sus células y la aparición de ciertos rasgos distintivos. De manera similar, al variar las concentraciones de estas hormonas en el medio nutritivo, los componentes de la planta varían en forma y tamaño. En otras palabras, con solo manipular estos pequeños químicos, se pueden crear cambios drásticos en la apariencia física y los atributos. Finalmente, con una impresora 3D alimentada con este material se pueden crear multitud de estructuras con gran precisión, como sofás o sillas con formas tan complicadas como se desee. Después pasa por un proceso de fraguado en la oscuridad que dura entre tres y cuatro meses, dependiendo del objeto. Durante este tiempo, el material se deshidrata y el resultado es un artículo elaborado en madera artificial con todos los atributos de la madera natural. Lo mejor es que en todo el proceso no se tala ni un solo árbol, siendo sostenible, ecológico, amigable con el medio ambiente y sin afectar a grandes bosques». Un equipo del MIT ha sido capaz de conseguir este hito que puede cambiar la historia de la ciencia.

Siguiendo con la misma explicación: «Sus creadores han descubierto que, ajustando algunos productos químicos necesarios durante el crecimiento del material, es posible ejercer un control muy preciso sobre las características mecánicas del material, como la densidad, la rigidez, el peso , etc., haciéndolo muy dúctil. Un ejemplo de ello es que los científicos han descubierto que, al disminuir las hormonas, se obtienen materiales de células abiertas y redondeadas con una baja densidad, mientras que niveles más altos de hormonas dan como resultado un material con células más pequeñas pero muy densas. Así, con este control químico se pueden crear piezas rígidas y resistentes u otras ligeras y suaves. Incluso se puede predefinir el color según la necesidad. Otra ventaja es que genera muy pocos residuos durante y al final del proceso. En conclusión, esta “ madera viva ” creada en laboratorio sustituye a la madera natural, marcando el fin de la deforestación que provoca el cambio climático. Además, no produce residuos, que son los causantes de las quemas y de la liberación de CO2. Ahora sólo queda esperar a su comercialización».