Pescado durante el embarazo. Todo lo que necesitas saber

La alimentación es uno de los aspectos que requiere más atención y cuidado por parte de la embarazada. Y es que es fundamental que lleve a cabo una dieta sana, completa y equilibrada en pro de su estado de salud y del de su bebé, ya que es la manera de conseguir que el periodo de gestación siga un curso normal durante el que no surjan complicaciones. En concreto, se hace imprescindible que vigile mucho el pescado que come, ya que es un producto complejo que si no se toma correctamente puede traer consigo serios problemas.

Si tú estás ahora esperando un hijo, sigue leyendo. A continuación te vamos a dar a conocer algunos datos de interés respecto al consumo de ese alimento que te ayudarán a no poner en riesgo tu salud o la del pequeño.

¿Por qué puede resultar peligroso?

Comer pescado durante el embarazo puede resultar peligroso si no se siguen las recomendaciones de los médicos. ¿Por qué? Por dos razones fundamentales:

• Puede provocar ser víctima de lo que se conoce como anisakis, que es un parásito de tipo digestivo que puede causar reacciones alérgicas e incluso alteraciones de distinta índole. Dolores abdominales, vómitos, diarrea, urticaria y también un choque anafiláctico, en los casos más graves, puede provocar ese gusano nematodo.

• Hay algunas modalidades de ese alimento que contienen altos niveles de mercurio, un elemento este que es responsable de que el feto pueda ser objeto de ciertas malformaciones o alteraciones en lo que respecta a su desarrollo neuronal.

Anisakis, ¿cómo evitarlo?

Sin lugar a dudas y como posiblemente sabrás, lo que hay que hacer para poder evitar que durante el embarazo, o en cualquier momento de tu vida, no te contagies de anisakis es procediendo a congelar previamente todo el pescado que vayas a comer. Es decir, que nada de tomarlo fresco, tienes que congelarlo antes porque a bajas temperaturas es como se consigue “matar” al parásito mencionado.

Eso sí, no te olvides tampoco de limpiarlo muy bien, retirarle las vísceras, lavarte bien las manos y todos los utensilios de cocina que uses para quitarle las mismas y, una vez que lo hayas congelado y lo saques para comerlo, que lo cocines adecuadamente.

De la misma manera, es fundamental que tampoco comas pescado que esté marinado o ahumado.

El pescado y el mercurio. Especies que sí se pueden comer y otras que no

Como hemos mencionado anteriormente, uno de los principales riesgos que trae consigo comer pescado durante el periodo de gestación es que aporta mercurio al organismo. Por eso, es importante que, para evitar problemas en el desarrollo del feto, se opte porque la mamá coma los pescados que no son peligrosos en ese sentido y deje de lado los que traen consigo altos niveles del mencionado elemento.

En concreto, a cualquier embarazada le debe ser útil conocer la clasificación que al respecto existe:

• Con contenido muy bajo en mercurio: merluza, sardinas, pescadilla, arenque, abadejo…

• Con contenido bajo en mercurio: palometa, caballa del Atlántico, bacalao, lenguado, atún enlatado tipo claro, trucha de agua dulce…

• Con contenido alto en mercurio: rape, lubina, atún enlatado blanco o albacora, raya, trucha de mar, pargo…

• Con contenido muy alto en mercurio: atún fresco, tiburón, caballa, mero, pez espada…

Otros datos de interés

Además de todo lo expuesto sobre la ingesta de pescado durante el embarazo, se hace necesario conocer otros datos interesantes al respecto:

• El salmón, por regla general, se incluye entre las especies con bajo contenido en mercurio. No obstante, los que proceden de criadero se considera que aportan unos altos niveles del citado elemento.

• Aunque hay que extremar la atención y el cuidado con este alimento, el mismo se hace necesario que esté presente en la dieta de cualquier gestante porque le otorga nutrientes, vitaminas, ácidos grasos omega 3 y proteínas, al tiempo que es muy bajo en calorías.

• Distintos estudios llevados a cabo han venido a demostrar que una correcta ingesta de pescado por parte de las embarazadas trae consigo que luego sus hijos puedan desarrollarse mejor a nivel intelectual y de aprendizaje.

• De la misma manera, no podemos olvidarnos del hecho que, en algunos casos, comer el citado alimento de forma inadecuada, sin seguir las recomendaciones presentadas al respecto, ha dado lugar a casos de féminas que han parido prematuramente o que han tenido bebés con bajo peso. Esto sin olvidar que en situaciones más graves los pequeños han venido al mundo con alteraciones a nivel muscular, que han tenido a la larga dificultades en cuanto a memoria o lenguaje e incluso con ceguera y parálisis.

• Es fundamental que la mujer no tome durante los nueve meses ni sushi ni sashimi ni tampoco lo que podrían ser boquerones en vinagre o carpaccio de pescado.

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