Escuelas

La OCDE quiere cambiar el horario de los colegios en España: así quedaría

Un horario que seguiría el ejemplo de países como Dinamarca o Portugal

El cambio podría implicar además inversiones en alimentación e infraestructuras

8 claves para organizar las tareas de verano de los niños

Foto de unos niños en una clase escolar que levantan la mano y sonríen.
Niños en clase.
Blanca Espada

Aunque los niños están actualmente disfrutando de sus vacaciones de verano, en cuanto llegue septiembre, comenzaremos a pensar en el nuevo curso escolar. Y a este respecto, parece que el sistema educativo español podría enfrentarse a cambios significativos. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ha propuesto una revisión del horario escolar tradicional, lo que podría impactar directamente en la rutina diaria de estudiantes, padres y docentes. Este ajuste no sólo busca mejorar el rendimiento académico, sino también combatir el creciente problema del abandono escolar en el país.

En España, el horario escolar ha sido el mismo durante décadas, con jornadas intensivas por la mañana. Sin embargo, la OCDE ha observado que este modelo podría no estar sirviendo de manera efectiva a las necesidades educativas y sociales de los estudiantes. En un esfuerzo por reducir el absentismo y promover una mayor inclusión y bienestar, la organización ha sugerido la eliminación del horario intensivo en favor de una jornada partida. Este cambio no sólo  busca mejorar el aprendizaje, sino también alinear el sistema educativo español con prácticas más efectivas observadas en otros países europeos. De este modo, y con el el inicio del nuevo curso escolar a la vuelta de la esquina, las discusiones sobre el cambio de horario propuesto por la OCDE están cobrando fuerza. Se espera que este nuevo modelo de jornada escolar ayude a identificar y apoyar a los centros educativos más vulnerables, donde la necesidad de reformas es más urgente. Así, el esfuerzo colaborativo entre la OCDE, el Ministerio de Educación y Formación Profesional, y la Dirección General de Apoyo a la Reforma Estructural de la Comisión Europea, apunta a un objetivo claro: reducir el abandono escolar temprano en España y garantizar una educación de calidad para todos los estudiantes.

La OCDE quiere cambiar el horario de los colegios en España

El horario escolar tradicional en España, caracterizado por jornadas intensivas por la mañana, ha sido una constante durante muchos años. Este modelo ha permitido a los estudiantes salir temprano del colegio, lo que a menudo significa que las tardes están libres para actividades extraescolares o tiempo libre. Sin embargo, con el aumento del abandono escolar y los desafíos educativos actuales, este enfoque está siendo reevaluado. La OCDE ha identificado la necesidad de un cambio que no sólo se centre en el tiempo que los estudiantes pasan en la escuela, sino también en la calidad de ese tiempo.

Razones detrás de la propuesta de la OCDE

El principal objetivo de la OCDE es reducir el absentismo escolar y fomentar la inclusión y el bienestar de los estudiantes. La organización ha notado que el modelo actual no responde adecuadamente a las necesidades de aprendizaje de los alumnos, especialmente en los centros educativos más vulnerables. Un horario escolar partido, similar al de países como Dinamarca o Portugal, podría ofrecer una solución. Este modelo permite una jornada completa más flexible, que no sólo  aumenta el tiempo de aprendizaje sino que también facilita una mayor interacción entre estudiantes y docentes, y proporciona un entorno más estructurado y equilibrado.

Cómo sería el nuevo horario escolar

El nuevo horario propuesto por la OCDE seguiría un esquema de jornada partida. Esto implicaría una sesión de mañana, seguida de un descanso para el almuerzo, y luego una sesión vespertina. Este cambio no sólo amplía el tiempo que los estudiantes pasan en la escuela, sino que también proporciona un entorno más equilibrado para el aprendizaje y el desarrollo personal. Además, con este nuevo horario, se reduciría la necesidad de clases extraordinarias por la tarde, lo que podría aliviar la carga económica sobre las familias que actualmente pagan por actividades adicionales.

Impacto en los estudiantes y las familias

La implementación de un horario escolar partido podría tener múltiples beneficios para los estudiantes. Al tener más tiempo en la escuela, los alumnos tendrían más oportunidades para participar en actividades extracurriculares dentro del propio horario escolar, reduciendo la necesidad de buscar estas actividades fuera del colegio. Para las familias, esto podría significar un ahorro significativo en costes asociados a actividades extraescolares y refuerzos educativos. Además, un horario más estructurado podría facilitar una mejor organización familiar y un equilibrio entre el tiempo de estudio y el tiempo libre.

Desafíos y consideraciones

A pesar de los beneficios potenciales, la transición a un horario escolar partido también presenta desafíos. Será crucial asegurar que las infraestructuras escolares puedan acomodar este cambio, especialmente en términos de alimentación y espacios adecuados para el descanso y las actividades vespertinas. Asimismo, la correcta remuneración y formación de los docentes será fundamental para garantizar que el nuevo horario se implemente de manera efectiva y sostenible. La OCDE ha señalado que estas medidas podrían ser una transición hacia inversiones más amplias en el sistema educativo español, que incluyen mejoras en infraestructuras y condiciones laborales para los docentes.

El cambio de horario escolar propuesto por la OCDE representa una oportunidad significativa para reformar el sistema educativo español. Si bien la implementación de un horario partido puede parecer un desafío, los beneficios potenciales en términos de reducción del absentismo, mejora del rendimiento académico y apoyo a los estudiantes más vulnerables son claros. Con la colaboración entre la OCDE, el Ministerio de Educación y otras instituciones, España podría dar un paso importante hacia un sistema educativo más inclusivo y efectivo. Con el inicio del nuevo curso escolar en septiembre, será crucial seguir de cerca estos desarrollos y preparar a las comunidades educativas para los cambios que se avecinan.

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