Juicio contra un hombre por maltratar continuamente a su ex pareja en Manacor

Las agresiones fueron continuas durante dos años e incluso le llegó a instalar una aplicación en el móvil para vigilarla

Sede de la Audiencia de Baleares, en Palma.
Sede de la Audiencia de Baleares, en Palma.

La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Baleares juzga, este miércoles a partir de las 10.00 horas, a un hombre acusado de romper una orden de alejamiento para seguir maltratando, golpeando, insultando e incluso agrediendo sexualmente a su ex pareja en Manacor.

La Fiscalía atribuye al encausado varios delitos supuestamente cometidos entre 2019 y 2021 por los que pide un total de 22 años y seis meses de prisión. Además, solicita que no pueda tener armas durante nueve años y medio y no se aproxime a menos de 500 metros de la víctima durante 29 años.

Así mismo, el Ministerio Fiscal solicita la medida de libertad vigilada durante ocho años y una indemnización de 12.000 euros por daños a la víctima, así como una multa de 22 meses a razón de 12 euros diario.

El hombre, condenado anteriormente por el juzgado de Manacor por delito de malos tratos contra la misma víctima, quebrantó, según el escrito del fiscal, la orden de alejamiento y se puso en contacto con ella, en diciembre de 2019, para hablar sobre su relación.

A partir de ahí, comenzó a golpearla por ataques de celos. El Ministerio Fiscal sostiene cómo el hombre «no aceptó la ruptura y continuó llamando» a la mujer para que lo perdonara, informa Europa Press.

En uno de los encuentros, el mismo aprovechó y le instaló una aplicación en el móvil para vigilar todos sus movimientos, incluso le hablaba a través de la misma. «Si te quitas la aplicación, te mataré delante de los ojos de tus hijas», le dijo el acusado a la mujer, según el fiscal.

«Con una clara intención de posesión sobre la víctima», escribe el fiscal, «de desprecio sobre su condición de mujer y de no reconocimiento de la autonomía», logró mantener su control a través del móvil hasta que ella quitó la aplicación y el hombre se presentó en su casa.

Al principio, se puso a llorar pero después se la llevó a una zona rocosa donde la agredió sexualmente hasta hacerla vomitar. Desde entonces, la Fiscalía argumenta que la mujer se siente anulada y ha perdido su trabajo, su familia y su vida.

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